El programa de Carlos Sobera muestra la peor cara de su invitada, que desde un primer momento rechazó a Miguel por su forma de vestir
First Dates no para de sorprender a la audiencia. El programa presentado por Carlos Sobera sigue consiguiendo a grandes protagonistas que hacen las delicia del público. Así ha sido el caso de Anita, que desde un primer momento se mostró contraria a su cita y se mostró muy molesta por la elección del programa.
Por su parte, Miguel, mostró una actitud totalmente contraria. Sin embargo, nada fue como ambos esperaban y la decisión final estaba clara. Eso sí, hasta llegar ahí, Anita sorprendió una y otra vez atacando a Miguel por cada uno de sus aspectos que conocía. Incluso hablaron de política, algo que acabó con la cita de manera definitiva.
Anita y su chulería desmedida
Nada más ver que Miguel era el hombre elegido para su cita, Anita comenzó a mostrar su descontento. La comensal comentó que no le gustó nada que se presentara con una camisa sin planchar y sin arreglarse. Además, afirmó que le gustan los chulillos como ella, quien decía que ligaba hasta en el supermercado.
Por si fuera poco, confesó que ella no se tomaba ninguna pastilla y aseguró que él, sin conocerlo, seguro que se tomaba veinte. Es por eso que desde un primer momento mostró su rechazo, puesto que según ella, él buscaba una ama de casa y una maruja, algo que no encontraría en ella porque no es su estilo.
La política acaba con la cita
A pesar de que Miguel se mostró encantado con la cita, llegando incluso a declarar que para su edad Anita se conservaba muy bien, la comensal acabó con sus esperanzas. La decisión final era la esperada, y aunque Miguel estaba dispuesto a tener una segunda cita, Anita rechazó la propuesta.
Y es que la comensal declaró que no se iría con Miguel ni borracha después de descubrir que el no votaba a Vox. Algo que dilapidó todas las esperanzas puestas en la cita. Y es que Anita siempre mostró aires de superioridad, motivo por el cual acabó rechazando la cita y se marcho sola de First Dates después de declarar que había acudido para ver Madrid y a Carlos Sobera.
