La entrevista de Pablo Iglesias en el programa de actualidad y debate político ha generado multitud de opiniones dispares
El incombustible Antonio García Ferreras, presentador del espacio de actualidad y debate de Al Rojo Vivo de La Sexta, es uno de los hombres que siempre están presentes allá donde va la noticia, y no solo por su labor de periodista, sino también por sus grandes apariciones en televisión que no han dejado lugar a dudas como el que más presencial de todos.
Y es que su papel en Al rojo vivo lo ha convertido en la diana perfecta para las criticas, puesto que siempre ha mostrado un posicionamiento político a favor de la izquierda y de Pablo Iglesias. Es por eso que muchos han cargado contra él y su programa, puesto que no lo consideran objetivo, también ahora con la entrevista reciente al Vicepresidente del Gobierno.
Ferreras y Al Rojo Vivo reconocen su sesgo progresista pero en la entrevista hubo disparidad
El propio Ferreras reconoce su sesgo progresista, pero entre sus colaboradores y amistades confesas están Florentino Pérez, Francisco Marhuenda o Eduardo Inda, pero también José Luis Rodríguez Zapatero o el ex secretario de Estado de Comunicación y ex marido de Carme Chacón, Miguel Barroso.
Ante ello, y a raíz de la entrevista con el líder de la formación morada, Pablo Iglesias, muchos son los que le sitúan a un lado y hacia el otro a tenor de lo explicado con la presencia del político. Tanto, que los espectadores están de acuerdo en que cada vez se va alejando más de su lado de la izquierda para posicionarse en la derecha.
La audiencia manifiesta los bandazos del presentador
Esto es debido a los numerosos ataques a los que el Vicepresidente se tuvo que enfrentar también en el programa de actualidad y debate político. “Qué repaso le ha dado el Vicepresidente a la prensa fachístoide sín perder un ápice de su calma…Bravo!!!”, decían unos. Mientras, por otro lado, también se dieron de cuenta de que Ferreras fue muy permisivo con el de Unidas Podemos.
Tanto, que la audiencia de Al Rojo Vivo criticó también la presencia, el tono y el camino dirigido a Pablo Iglesias por parte del presentador, al que mantienen de su lado más de izquierdas “para hacerle la cama” en una entrevista más suave. “¿Prensa facha? En al rojo vivo de Ferreras? Sin palabras”, decían otros.