Isabel Ordaz y su visión contundente sobre ‘La que se avecina’
Isabel Ordaz, reconocida por su papel como Araceli en La que se avecina, se ha mostrado crítica respecto a la dirección que ha tomado la serie en sus últimas temporadas. La madrileña expresa que la comedia auténtica y orgánica ha sido desplazada por un humor más forzado y dependiente de un ingenio efímero. Una auténtica comedia, afirma, se basa más en las reacciones y las dinámicas de los personajes que en la mera ocurrencia puntual de un diálogo.
Para Ordaz, el cambio no ha sido positivo. El ritmo acelerado y la constante búsqueda de un chiste rápido, según su perspectiva, perjudican la esencia de una comedia de situación. La actriz añora los días en que las interacciones entre personajes y el entorno eran los verdaderos protagonistas del humor.
La comparación inevitable con ‘Aquí no hay quien viva’
No es secreto para nadie que La que se avecina y Aquí no hay quien viva comparten mucho en términos de ADN creativo, siendo obras de los mismos creadores. Pero para Isabel, la anterior serie era un ejemplo perfecto de cómo ejecutar una comedia de situación. Hablaba de relaciones genuinas, anhelos y la vida en comunidad, y todo ello se presentaba con un equilibrio entre ternura y humor.
Ordaz recuerda con cariño su participación en Aquí no hay quien viva, una serie que, según ella, ofrecía guiones espectaculares y un reparto extraordinario. La autenticidad y la humanidad de los personajes de esa serie les otorgaban un carisma que, siente, falta en la serie sucesora.
El futuro de ‘La que se avecina’
Pese a las críticas, La que se avecina se prepara para su decimocuarta temporada, consolidándose como una de las series más longevas de la televisión española. La pregunta que muchos se hacen es si las críticas de Ordaz reflejarán un sentimiento general del público o si simplemente serán vistas como una opinión aislada.
Solo el tiempo dirá si la serie logra evolucionar y reconectar con aquellos que, como Isabel, sienten que ha perdido su rumbo. Mientras tanto, los fans esperan con ansias los nuevos episodios, buscando ver reflejadas sus propias opiniones. Las expectativas son altas y el equipo de producción tiene el desafío de superarlas o, al menos, de reconciliarse con su audiencia más crítica.
