Netflix estrenó una nueva serie llena de muchos secretos y mentiras
Este viernes 14 de octubre, se estrenó la serie más esperada del momento, Sagrada Familia. Llegó para contarnos la historia de Gloria, su bebé y Aitana, su au-pair, con quienes forma un aparentemente idílico núcleo familiar. Pero las apariencias engañan, y ni Gloria ni su familia son quienes dicen ser en realidad.
De hecho, ni ella se llama Gloria ni Aitana es su au-pair, sino su hija. Igual que Abel, al que tiene recluido en un sótano para evitar que los vecinos de Fuente del Berro, el tranquilo y acomodado barrio al que se han mudado, descubren el oscuro secreto que ella y sus hijos esconden.
Sagrada Familia será un thriller dedicado exclusivamente al rol de la maternidad
Para evitar que la verdad salga a la luz, Gloria y los suyos deben actuar con normalidad. Y eso, en el caso de la matriarca, pasa por forjar una amistad con algunas de las vecinas de la zona. Todas ellas muy diferentes entre sí, pero todas ellas unidas por el hecho de ser madres.
Aquí encontramos desde futuras madres que no tienen claro si quieren serlo a progenitoras que se vuelcan en el cuidado de su pequeño para que el padre pueda trabajar, pasando por vientres de alquiler y mujeres que tienen grabado a fuego aquello de que una madre haría cualquier cosa por sus hijos.
Su creador mexicano espera que sus protagonistas lleven la producción a un gran éxito
La nueva serie de Manolo pretende reflejar que se puede ser madre de muchas formas. Aunque con su mezcla de thriller no busca ser un tratado realista sobre la maternidad, pues hacerlo probablemente no sea labor del mexicano. Sí, en cambio, coger algunos de estos perfiles y llevarlos hasta el extremo.
Sagrada Familia, adolece por momentos de cierta falta de ritmo, así como de claridad en otros, lo que sin duda lastra el resultado final. Pero a cambio tenemos a unas Nawja Nimri y Alba Flores entregadas para la causa, lo que hará las delicias de quienes se acerquen a la serie solo por ellas.