El enamorado de Miralles con un pie fuera de este mundo
En el más reciente capítulo de Servir y proteger, veremos al inspector Tomas Salgado postrado en una cama debatiéndose entre la vida y la muerte tras el fallido operativo en la casa abandona de Lucas Infante. Donde es herido de gravedad y debe ser llevado al hospital para su posterior operación donde su recuperación está en duda.
Claudia Miralles se entera de la fatídica noticia y rápidamente acude al centro médico donde tienen a Salgado. Allí lo espera también la ex mujer de Salgado donde desea que su ex esposo se recupere satisfactoriamente de lo ocurrido. La jefa de distrito sur espera con paciencia a que todo salga bien para poder preguntarle algunas cosas a su compañero.
El operativo de Salgado y Nacha que casi acaba con la vida del inspector
Con Lucas Infante detenido en la comisaría y tras no tener éxito en el interrogatorio que se le ha hecho. Salgado y Nacha deciden volver al sitio donde capturaron al asesino de policías. Y recolectar más pruebas que incriminen más y más a Infante. Sin embargo no esperaban toparse con un enemigo que deja herido al inspector.
Bremón es el encargado de informar a todo el distrito el desafortunado episodio que sufrió Salgado. Inmediatamente Miralles entra en pánico y decide acompañar al hombre que está enamorado de ella. Las buenas noticias es que está fuera de peligro pero las malas es que en cualquier momento puede recaer. Además aún no se sabe si el paciente quedará con alguna secuela.
El operativo de Salgado no es la única mala noticia, Lucas Infante hace de las suyas en distrito sur
Los varios interrogatorios que se le han hecho a Infante no están sirviendo de nada. El criminal no está soltando la información que necesitan los policías y las cosas que ponen tensas en la comisaria. “Pensé que en esos últimos minutos antes de que dispararas el gatillo contra mí, estabas siendo sincero. Pero veo que no. Dinos quién es esa persona” dice con recelo Miralles.
Sin embargo lo peor está por suceder cuando Lucas Infante hace una maniobra y logra capturar al comisario apuntándole con un arma y diciendo “Ahora vais a estar todos muy quietos si no queréis que lo pague vuestro comisario”. Carlos y Lara se impacientan y mientras le apuntan también deciden tomar riesgos en el asunto.
