No existe mucho margen de mejora, es más, se dice que todo este impulso podría llevar a correcciones de guion para hacer reaccionar el medio
Una de las indicaciones más agravantes del último tiempo en la televisión española es sin duda el margen de audiencia que emiten los diferentes programas. Algunos, como es el caso de La que se avecina, tiene o ha tenido siempre una regularidad que se ha visto fracturada en el último episodio. Extrañados por ese hecho, han empezado a desviar su mirada a otro punto.
En la última medida de control se ha evidenciado que lo plano de los libretos y los chistes flojos de Antonio Recio ya no están teniendo el mismo efecto que antes. Prueba de ello ha sido la respuesta negativa de la gente ante el fuerte impulso que han tenido otras producciones y de otros canales como no podía ser de otro modo.
Los números no mienten, Antonio Recio en La que se avecina ha mostrado flaquezas
Según las cifras arrojadas, se dice que La que se avecina ha cumplido con su peor margen. Ha perdido 6 décimas con relación a su última medición y esto parece ser poco pero es determinante. En total, han cedido 224.000 espectadores, lo que agrava la situación de lleno y empieza a obligar a los gestores a manejar alternativas viables.
L 12 temporada no ha sido lo esperaban, ya se está revisando en detalle lo que está pasando. No se le puede cargar todo el agua sucia a los personajes y al menos esa ha sido la sensación, pero está claro que si deben mover algunas incidencias para trabajar en las respuestas. En términos generales han sido solo 1.308.000 espectadores los que han visto la última emisión.
Una nueva visualización lleva al cambio radical de impulso
Ahora es el momento, de ver un efecto positivo a ver la evolución del medio para enfocar de nuevo a los seguidores de la serie de comedia. No se conoce qué vaya a ser de todo esto, aunque si se admite que la clarificación de todo es parte de la escena de evolución. Las mediciones han sido muy negativas, y en cambio los competidores directos se han llevado todas las migas. Así de cruel viene siendo el espacio.