El personaje interpretado por Nathalie Seseña no lo tendrá nada fácil en la nueva temporada de la serie y tampoco lo ha tenido durante el tiempo que su marido ha pasado encarcelado
Berta es uno de los personajes que seguirá en La que se avecina en esta nueva temporada, la cual se avecina trepidante. Especialmente para ella, pues ha atravesado un duro momento. Y es que, tras lo ocurrido en la duodécima entrega, ha tenido que vivir sola durante un año y medio. Todo porque Antonio Recio ha estado en prisión debido a que se coló en casa de Pablo Iglesias, a quien le cortó la coleta.
Debido a la entrada de su marido en prisión tuvo que hacerse cargo de Mariscos Recio, con todo lo que ello conlleva. Ahora, gracias al adelanto de la nueva temporada, podemos intuir que su etapa al frente de la empresa no ha sido positiva, viéndose incluso obligada a vender el coche de su marido para poder subsistir. Algo que afectará a la relación de Berta con Antonio en la nueva temporada de La que se avecina.
Berta, al límite en La que se avecina
En los últimos adelantos que ha mostrado Telecinco hemos conocido que la familia Recio no atraviesa su mejor momento. Especialmente Berta, quien ha tenido que tomar importantes decisiones mientras su marido estaba en prisión. Decisiones que ahora conocerá Antonio Recio al salir de prisión y que no le harán ningún tipo de gracia.
La primera de las decisiones que conocerá será la de que su mujer ha tenido que vender el Mercedes de la familia. Algo que conocerá Antonio Recio al salir de la cárcel, pues no encontrará su vehículo. Su reacción al enterarse de que su mujer lo tuvo que vender lo indignará profundamente, sin importarle la difícil situación económica que está atravesando. Pero esto no acabará aquí.
Mariscos Recio quiebra sin Antonio
Además de tener que vender el coche que Antonio Recio tanto apreciaba, Berta tampoco ha conseguido mantener a flote el negocio familiar. Mariscos Recio ya es historia de La que se avecina, pues la empresa ha quebrado. Una noticia que el personaje interpretado por Jordi Sánchez conocerá al salir de prisión y que le afectará notablemente.
Al llegar a Contubernio 49 se reencontrará con el mítico cartel de Mariscos Recio, siendo incapaz de controlar las lágrimas. Pero aún hay más, pues debido a esta quiebra se quedará sin trabajo. De este modo, comenzará a buscar empleo y terminará trabajando como repartidor para la empresa de Rosario Parrales, quien en anteriores temporadas de La que se avecina fue su empleado.