Revuelo en la comisaría de TVE después de la llegada de un paquete sospechoso
La comisaría de Servir y Proteger vuelve a estar bajo presión después de que el famoso Fantasma enviara a Miralles un paquete sospechoso, que índica que le queda poco tiempo para salvar a una víctima. Es por ello que tienen que trabajar a contrarreloj para dar con el paradero del asesino.
Mientras tanto en el barrio del Distrito Sur se presencia un gran altercado por parte del padre de Saúl, Isidro, en el Moonlight. El hombre que aún no ha aceptado la condición sexual de su hijo, aparece justo cuando se encuentra en el bar teniendo una cita con otro chico, lo que aumenta su furia.
El paquete que señala a la nueva víctima del asesino más temido por el Distrito Sur
Cuando la policía de Servir y Proteger estaba relajándose por las pocas noticias que llegaban del Fantasma tras el intento de asesinato hacia Antonio, llega una nueva amenaza por parte del asesino. Así lo ha podido comprobar Miralles, quien ha sido la receptora de ese paquete.
Una vez abierto se ha percatado de que le ha enviado una máscara de nuevo. Por lo que tiene claro lo que pasará en menos de 24 horas, otra víctima caerá a manos del asesino más temido del barrio. Por ello, vuelven a jugar contra reloj para evitar que lo peor ocurra en el Distrito Sur.
Las presas consiguen que Teresa confiese su autolesión para salvar a Hanna
Por otro lado, las cosas cada vez se complican más en prisión para Cata, Hanna y Vega. Puesto que el plan para que Cata se acercara a Rebeca ha fallado. Puesto que para dar credibilidad a su lealtad, Rebeca le ha pedido que acabe con la vida de Teresa, cosa que no puede hacer.
A pesar del fallo de plan, han conseguido un gran paso para ayudar a limpiar el nombre de Hanna, que Teresa confiese finalmente que fue ella la que se autolesionó, por lo que Hanna no tuvo nada que ver. Después de ello ya están un poco más cerca de obtener el objetivo que tanto ansían.