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La metedura de pata que deja a Emily en París sin trabajo en la tercera temporada

La protagonista de la serie inspirada en Francia es despedida por Sylvie después de ser descubierta trabajando a dos bandas para su ex jefa

La protagonista de Emily en París se encuentra en apuros durante la tercera temporada de la serie de Netflix. Emily Cooper es descubierta por Sylvie después de estar trabajando a dos bandas, junto a Madeline. Este suceso la deja a las puertas de la Agencia Grateau, que tantos buenos momentos le ha dado durante toda su experiencia en París. 

Por supuesto, este dilema no tarda demasiado tiempo en resolverse durante el resto de la tercera temporada de Emily en París. Finalmente, su ex jefa, Sylvie, acaba cediendo a pesar de la deslealtad, y le pide que vuelva a la agencia. Así, podemos ver un claro guiño a la tercera temporada cuando le afirma que la verá el lunes, y que no llegue pronto.

Agencia Grateau de Emily en París

Emily Cooper acaba trabajando de camarera para el chef Gabriel

Durante esta época oscura de Emily Cooper en París, acaba con el trabajo más inesperado de la historia, siendo camarera del chef Gabriel. El motivo principal de su contrato es debido a que el restaurante se queda sin personal para servir en las mesas. Así mismo, Emily entra a trabajar después de quedarse sin su puesto de trabajo en la Agencia Grateau.

A pesar de todos los dilemas, la protagonista está muy contenta por comenzar en su nuevo trabajo, ya que dicho puesto le permite completar una serie de pequeñas tareas. De esta forma, somos testigos de un nuevo acercamiento entre la pareja más deseada por los seguidores de la serie, aunque hasta el momento no hayan tenido luz verde para dar rienda suelta a su relación.

La escena de Emily en París que no es adaptable a la vida real

Otro de los momentos que los seguidores de la serie de Netflix no han querido pasar por alto, es el olor a marihuana que se presenta en el lugar de trabajo de Grégory. Esto mismo lo podemos observar cuando el equipo de la agencia van a ver los diseños de los uniformes creados para las azafatas. Un suceso poco probable que ocurra en la vida real.

Cabe tener en cuenta que este tipo de estupefacientes está completamente prohibido en Francia, lugar donde se rueda la serie. Por lo tanto, es completamente imposible que esta escena sea trasladada a la vida real. Además, Francia es uno de los países de la Unión Europea que cuenta con las normas más estrictas para el consumo de estupefacientes.