Maniobra estratégica de Ana Botín especialmente rentable para la entidad cántabra y un golpe para sus rivales
El Banco Santander necesitaba dar un golpe encima de la mesa para no perder posición de liderazgo ante la gran fusión que preparan Bankia y CaixaBank. Para ello, desde hace un tiempo, en la entidad que preside Ana Botín se buscaban soluciones para no perder demasiados clientes en las zonas más pequeñas y rurales.
Y es que en la última década, el Banco Santander ha cerrado más de 20.000 oficinas. Los motivos, por un lado es evidente que la crisis financiera tiene mucho que ver. Pero por otro el avance de la tecnología, que hace que de forma online se puedan realizar la gran mayoría de gestiones.
El problema de las zonas rurales
Esta circunstancia, se ha hecho más recurrente en zonas pequeñas. Porque en oficinas rurales la afluencia de clientes y la venta de servicios es mucho menor. Pero claro. En los pueblos todos quieren un cajero para tener efectivo. Circunstancia que hacía peligrar la posición dominante de Banco Santander.
Sobre todo a raíz de la fusión entre Bankia y CaixaBank, que tendrán mucho más controladas las zonas rurales. Pero ante eso, Ana Botín se ha movilizado y ha firmado un acuerdo rompedor con Correos, que entrará en vigor más o menos a la vez que la fusión de Bankia y Caixabank.
Acuerdo con Correos
Gracias a Correos, el Banco Santander podrá acceder a esas zonas rurales gracias a las 4.675 puntos de atención al ciudadano que tiene Correos y a las 3.222 sucursales que ya tenía el Banco Santander. El servicio incluirá tres acciones principales.
Retirada e ingreso de efectivo en cualquier oficina de Correos y posibilidad de llevar dinero a cualquier domicilio de España por medio de los carteros. De esta forma, el Banco Santander se asegura seguir en lo más alto, también en las zonas rurales.