El artista español aplaca las habituales críticas con la mejor actuación de su carrera
Mario Casas es uno de los actores más exitosos que hay actualmente en España. Sin embargo, la mayoría lo achaca a su incontestable éxito con las adolescentes, prendadas de su exuberante belleza y forma física. Pero en los últimos trabajos empezamos a ver al Mario Casas actor, que desborda talento y se atreve con todo. El practicante es un ejemplo.
El practicante es un thriller psicológico de Netflix, estrenado la semana pasada y que ha causado sensación. Para este papel, Mario Casas se vio obligado a perder 10 kilos y cambiar radicalmente tanto física como mentalmente.
Un Mario Casas más maduro
Poco queda ya de aquel Mario Casas que salía en todo tipo de anuncios de televisión solo por guapo. O del chico joven que aparecía en Los Hombres de Paco, El Barco o A tres metros sobre el cielo. Y sus detractores comienzan a quedarse sin argumentos.
Un ejemplo son sus estrenos en los últimos meses. Películas muy trabajadas y diferentes como Hogar o El practicante. Papeles en los que se aprecia el mejor Mario Casas de su carrera. Un artista que se centra en trabajar y su familia, muy alejado de la imagen que se tiene de él en realidad.
El mejor Mario Casas
Con El practicante muchos coinciden en que se ha visto al mejor Mario Casas de siempre. Un actorazo, soberbio. Muchos en el rodaje se preocuparon por las posibles secuelas que El practicante le podía causar al español.
Porque su preparación este papel fue tan dura que su solo aspecto daba que pensar. Pero Mario Casas atraviesa su mejor momento tanto a nivel familiar como profesional. No queremos desvelar nada. Pero hay que ver El practicante. En Netflix desde el pasado 16 de septiembre.