La famosa cadena recibe críticas de usuarios que prefieren el producto nacional antes que lo que procede del exterior
Tras la crisis sanitaria del coronavirus, las consecuencias económicas suponen un auténtico quebradero de cabeza para los gobiernos de las principales potencias europeas. Unos países hicieron bien las cosas en su momento y tenían unos márgenes de deuda que hacen posible su rescate ahora. Otros, como España, están lejísimos de los parámetros lógicos.
Y esta situación hace que los Portugal, España o Italia, exijan a la Unión Europea que arrimen todos el hombro para salir de la crisis. Sin embargo, países más conservadores como Austria, Dinamarca, Suecia o Países Bajos que tienen la deuda bien, no quieren despilfarrar dinero de todos para ayudar a unos pocos.
Los llamados países frugales
Estas naciones tienen en común que suelen mantener la deuda por debajo del 60 por ciento del PIB, es decir, que gastan menos de los que ingresan. En una palabra, son mucho más responsables, tienen otro concepto de vida y no entienden el carácter festivo de los españoles, italianos, griegos o portugueses.
La ironía radica en que en sus países tienen dinero, pero no dónde disfrutarlo. Y acuden en masa a las paradisíacas playas del sur de Europa y a sus complejos hoteleros para disfrutar del sol y de la gastronomía. Una incongruencia, ¿no?
Son los llamados países frugales, un término que se ha decidido para referirse a Austria, Suecia, Dinamarca y Países Bajos. Es más, esta polémica está afectando a empresas del sector de la alimentación, o al menos así lo ha denunciado algún usuario.
Lidl, empresa de frugales
Y es que se han producido críticas de usuarios en las redes sociales explicando que por muchos defectos que se encuentren en la política de los supermercados de Mercadona, siempre será mejor una empresa que es valenciana.
En contraste con Lidl, que para muchos usuarios se trata simplemente de una empresa de los países frugales y que, por tanto, no debe tener la acogida de los españoles. Se ha hecho un llamamiento para comprar siempre en comercio local y no de países frugales.