La empresa de telecomunicaciones presenta problemas sin resolver en cuanto a los servicios que ofrece a sus clientes
La crisis económica derivada del coronavirus provoca guerra total de precios en las principales empresas. Muchas se aprovechan de la necesidad de ahorrar en gastos de sus clientes para colarles todo tipo de promociones. Vodafone es un ejemplo de esta práctica, aunque no siempre terminan brindando el servicio que prometen.
Es evidente que estamos en la era de Internet. Pero ya no de una conexión al uso. Es necesario una velocidad óptima para poder visualizar el contenido en streaming o jugar online a videojuegos de todo tipo. Las necesidades han cambiado.
Vodafone siempre con ofertas
Por eso muchas veces la decisión final entre contactar un operador móvil u otro radica en la cantidad de megas que ofrecen, además por supuesto del precio. Y no siempre se tienen en cuenta ciertos parámetros de calidad como contrastar con amigos o conocidos.
Vodafone tiene el siempre difícil reto de luchar contra Movistar. Por eso siempre está inventando ofertas que a priori parecen muy jugosas. Sin embargo, es tan solo una percepción, ya que en la práctica es muy diferente la historia.
Datos ilimitados que tiene un límite
Porque ahora que todo el mundo pone tanto énfasis en tener datos en el teléfono móvil para navegar por Internet, Vodafone lanzó la irresistible campaña de datos ilimitados. Dando por hecho que jamás se iban a agotar bajo ningún concepto.
Sin embargo, lo que no se contaba era que las conexiones no siempre funcionan como deberían. Y es que un cliente de Vodafone, harto de que no le funcione, ha decidido denunciar que tiene contratado los datos ilimitados pero que no se pasa de 10 megas de velocidad de subida y bajada de datos.
