El monarca tuvo un incidente con Hugo Chávez en la Cumbre Iberoamericana, el cual deterioró mucho la relación entre España y Venezuela
Eduardo Inda es, sin ningún atisbo de duda, uno de los periodistas más polémicos de España. Su posicionamiento político es bien claro, por lo que está acostumbrado a vivir con la polémica. Pero ahora, ha revelado una operación de 2.000 millones de dolares que incumbe al rey emérito Juan Carlos I.
Todo transcurrió después del famoso incidente que tuvo lugar en la Cumbre Iberoamericana, donde Juan Carlos I mandó a callar a Hugo Chávez, quien catalogó de fascista a José María Aznar, por entonces ya expresidente del Gobierno de España. Tras esto, la relación entre España y Venezuela quedó muy deteriorada.
Hugo Chávez corta la relación con España
Con motivo de lo sucedido, Hugo Chávez decidió suspender el pago de todos los contratos que tenía con empresas españolas. Debido a esto, el príncipe Felipe viajó a Argentina, donde coincidió con Hugo Chávez, con quien intentó rebajar la tensión existente. Pero no lo consiguió, puesto que el líder venezolano quería que se disculpara Juan Carlos I.
Finalmente, todo se solucionó después de un viaje de Hugo Chávez a España, que aprovechó para reunirse con Juan Carlos I. Tras esto, Venezuela volvió a restablecer los pagos que tenía con las empresa españolas. Pero no solo eso, sino que adjudicó 2.000 millones a una empresa en señal de buena fe.
2.000 millones de dólares que comprometen al Gobierno de España
Los 2.000 millones de dólares fueron destinados a una empresa con sede en Gijón gracias al Gobierno de Zapatero, que eligió a dedo a la empresa, llamada Duro Felguera. Pero ahora, tras todo lo acontecido, la Audiencia Nacional está investigando dónde se encuentran 54 millones de dólares que la empresa asturiana pagó a personas próximas a Hugo Chávez.
De esta forma, Juan Carlos I se vuelve a ver salpicado por una nueva polémica, algo que se ha convertido en habitual en las últimas semanas. Pero no solo eso, sino que el Gobierno de Zapatero también se encuentra en una delicada situación por los 2.000 millones de dólares que recibió procedentes de Venezuela y que adjudicaron a dedo.