Cada vez está más extendido que las compañías ofrezcan más megas de los que luego permiten alcanzar
El mundo de Internet se ha convertido en una jauría de empresas que prometen muchísimas cosas pero que a la hora de la verdad nunca se sabe qué puede pasar. Porque no todos los territorios son iguales, no llega siempre la misma cobertura… por lo que en realidad los anuncios de empresas como Movistar hay que tenerlos un poco en cuarentena.
Aunque es verdad que en las grandes ciudades la fibra óptica ha dado un salto cualitativo enorme, no es menos cierto que si nos ponemos a comprobar la velocidad de subida y bajada de datos muchas veces está por debajo de lo prometido.
Movistar se lava las manos
Otras veces igual la disposición de nuestra casa hace más difícil el paso de la señal, o cualquier interferencia cercana nos causa problemas. Pero Movistar siempre se lava las manos dejando claro que no es culpa de ellos. Hasta que la gente se harta.
Porque hoy en día muchísima gente trabaja desde casa, una tendencia que con la pandemia se ha incrementado todavía más. Y claro, necesitan que el internet de casa no les deje tirados. Pero hay situaciones que se hacen insostenibles.
La táctica milagrosa
Es muy frecuente que los usuarios, que normalmente manifiestan poca paciencia, terminen cortando por lo sano cuando no les escuchan o no les solucionan un problema con Internet. Hasta que hacen la llamada mágica para darse de baja.
En ese preciso momento las empresas, que prefieren tenerte más barato a que estés en la competencia, te hacen todo tipo de descuentos y lo que es más importante: consigue que Internet vuelva a recuperar la velocidad que prometían al contratarlos. En Movistar pasa con frecuencia.