El tradicional mensaje navideño del monarca no engancha a los españoles y es el menos visto desde 2016, cuando batió récord negativo
El discurso del rey Felipe VI volvió a evidenciar la progresiva falta de interés de los españoles. Una tradición que se inició el 24 de diciembre de 1975 cuando su padre, el por entonces rey Juan Carlos I, se dirigía al total de la nación. Sin embargo, a las puertas de 2023, la Casa Real interesa entre poco y poquísimo.
Y eso que ahora se retransmite en más cadenas. Pero ni por esas. En esta ocasión, al discurso de Felipe VI estuvieron atentos cerca de 6,7 millones de espectadores. Unas cifras que serían más que decentes para un programa o serie de televisión. Pero que en este caso pierde 1,2 millones con respecto al año pasado.
La televisión ya no interesa a los jóvenes
La idiosincrasia de la televisión hace que, a pesar de perder más de un millón de espectadores, el discurso de Felipe VI haya subido en cuota de pantalla. Pero este dato, lejos de maquillar los resultados, simplemente habla muy mal de la salud de la televisión en general.
Porque las nuevas tecnologías se han apoderado de los espectadores. Plataformas ya clásicas como Netflix, HBO o Amazon Prime Video, o el revolucionario Twitch, comienzan a emitir contenido que interesa mucho más que la televisión tradicional. Sobre todo mucho más a los jóvenes, que ya no consumen televisión.
El discurso de Felipe VI condenado a desaparecer
Hace unos 15-20 años no había hogar en España que no tuviese puesto el discurso del rey. Pero tampoco hay que echar la culpa a los jóvenes ni a las nuevas tecnologías. Los más mayores siguen consumiendo la televisión y tampoco han acudido en masa a ver el discurso de Felipe VI.
Los constantes líos de la Corona han provocado una desafección progresiva con la Casa Real. La decepción con las polémicas del rey emérito va en aumento y todo hace indicar que estamos ante una tradición en vías de desaparición. En 2023 volveremos a afrontar un tema que sale a colación cada Nochebuena.
