La situación de la pandemia, con un repunte de los contagios y nuevas medidas restrictivas ahogan a los pequeños comercios
El año 2020 siempre será recordado como el año de la gran pandemia mundial. Las víctimas humanas se han contado por miles y cuando parecía que por fin se empezaba a ver la luz al final del túnel, el repunte de los contagios está obligando a los gobiernos a tomar medidas cada vez más restrictivas. Los grandes perjudicados son los trabajadores autónomos.
Porque ahora, aunque se viva con aparente normalidad, son muchas cosas las que no se pueden hacer. El ocio nocturno está completamente cerrado, los teatros o estadios deportivos también. Se ha prohibido fumar en muchas zonas de España. Y por supuesto el turismo extranjero se ha desplomado.
Cada vez más difícil
Todas estas medidas han afectado a muchísimos negocios pequeños que viven del turismo, del ocio nocturno, de los visitantes extranjeros, de los fumadores… el consumo en genral ha bajado y esto repercute en muchos negocios.
Estos negocios en la mayoría de los casos tienen en común que están regentados por trabajadores autónomos que empiezan a estar realmente asfixiados por la situación. Porque sus ingresos se han desplomado, pero en los gastos nadie hace nada.
Los autónomos no pueden con los alquileres
La cuota de autónomos se sigue cobrando. Y los alquileres de los locales también. Esta última circunstancia es la gran culpable de que muchísmos autónomos estén seriamente pensando la opción de rendirse. De abandonar el sueño que tanto sudor y esfuerzo les ha costado.
Por eso piden a los gobiernos una solución con los alquileres. Porque es la gran razón de que puede generar una crisis mayor aún. Porque si se borran unos 200.000 trabajadores autónomos el país puede verse sumido en una crisis de dimensiones catastróficas.
