Decisión estratégica para los Juegos Olímpicos
Rafa Nadal ha confirmado este jueves que no participará en Wimbledon este año, una decisión que ya había insinuado tras su eliminación en Roland Garros. En cambio, el tenista español centrará todos sus esfuerzos en prepararse para los Juegos Olímpicos de París, con el torneo de Bastad, en Suecia, como parte de su preparación intermedia.
“Durante mi rueda de prensa posterior al partido en Roland Garros, me preguntaron sobre mi calendario de verano y desde entonces he estado entrenando en tierra batida. Ayer se anunció que jugaré en los Juegos Olímpicos de verano en París, mis últimos Juegos Olímpicos”, señaló Nadal en sus redes sociales.
El tenista explicó que su decisión de no cambiar de superficie y continuar jugando en tierra batida es lo mejor para su cuerpo. “Es por esta razón que echaré de menos jugar en Wimbledon este año. Me entristece no poder vivir este año el gran ambiente de ese increíble torneo, que siempre estará en mi corazón, y estar con todos los aficionados británicos que siempre me brindaron un gran apoyo. Los extrañaré a todos”, añadió.
Preparación en Bastad
Para prepararse adecuadamente, Nadal ha decidido participar en el torneo de Bastad, que se celebrará del 15 al 21 de julio, justo antes del inicio de los Juegos Olímpicos el 26 de julio. Este torneo tiene un valor especial para Nadal, ya que lo jugó al principio de su carrera y guarda buenos recuerdos de su experiencia tanto dentro como fuera de la cancha.
Los Juegos Olímpicos de París se celebrarán en las pistas de Roland Garros, un lugar muy familiar para Nadal, donde ha ganado 14 títulos a lo largo de su carrera. El capitán del equipo español, David Ferrer, anunció recientemente la lista de preseleccionados para los Juegos, en la que incluyó a Nadal. El mallorquín competirá tanto en el cuadro individual como en el de dobles, haciendo pareja con Carlos Alcaraz, número dos del mundo.
Nadal ya posee dos medallas de oro olímpicas: una en individuales en Pekín 2008 y otra en dobles en 2016. Su experiencia y éxito en estas competencias refuerzan su decisión de enfocarse en los próximos Juegos Olímpicos como su principal objetivo del año.
Tras un periodo complicado debido a graves lesiones, Nadal fue eliminado en la primera ronda del último Roland Garros por el alemán Alexander Zverev. En ese momento, ya anunció que no veía mucho sentido en preparar la temporada de hierba y luego volver a la tierra batida para los Juegos Olímpicos. Esta estrategia refleja su determinación por rendir al máximo en París, posiblemente en su última aparición olímpica.