Los positivos por sustancias prohibidas de dos grandes figuras desatan dudas sobre la transparencia y el futuro del deporte
El tenis enfrenta una crisis inesperada tras los positivos de Jannik Sinner e Iga Swiatek por sustancias prohibidas. El italiano dio positivo por Clostebol en dos ocasiones, mientras que la polaca fue sancionada por trimetazidina. Ambos casos han generado un debate profundo sobre la gestión de estas situaciones y la falta de transparencia en el deporte. Estas revelaciones sacuden un deporte que históricamente ha tenido poca relación con el dopaje.
Olivier Niggli, director general de la AMA, señaló que la contaminación podría ser clave en estos casos. Sinner afirmó que su positivo se debió al uso accidental de un producto de su fisioterapeuta, mientras que Swiatek explicó que la trimetazidina provenía de un suplemento contaminado. Esta falta de control en los procesos despierta dudas sobre los estándares actuales. La AMA plantea crear una mesa de trabajo para analizar cómo gestionar casos similares en el futuro.
Críticas y comparaciones entre los casos de dopaje recientes
La falta de transparencia en la gestión de los positivos ha generado indignación dentro del mundo del tenis. En el caso de Sinner, los positivos no se hicieron públicos hasta cinco meses después, permitiéndole seguir compitiendo sin restricciones. Por otro lado, Swiatek cumplió una sanción provisional mientras adaptaba su equipo técnico tras el incidente, lo que también generó cuestionamientos sobre su trato preferencial.
Simone Halep, quien fue sancionada previamente por un caso similar, criticó duramente la desigualdad en las decisiones de la ITIA. Mientras Halep recibió nueve meses de sanción, Sinner y Swiatek enfrentaron sanciones más leves, lo que desató la frustración de la rumana.
El tenis en busca de soluciones ante la crisis del dopaje
El director de la AMA, Niggli, propuso establecer nuevos umbrales para evitar sanciones por microdosis accidentales, generando opiniones divididas. Esta medida, según algunos, podría abrir una puerta peligrosa al abuso de sustancias, mientras que otros consideran que podría reducir casos de contaminación injusta. La decisión de implementar estas reformas podría transformar la manera en que el tenis aborda el dopaje.
Mientras el debate continúa, figuras como Nick Kyrgios han expresado su frustración con la situación actual. Según Kyrgios, la falta de claridad y consistencia en las sanciones pone en riesgo la credibilidad del deporte. La creación de una mesa de trabajo, anunciada por la AMA, podría representar un primer paso para recuperar la confianza perdida.
