El tenista balear explicó también el porqué de sus lagrimas en la despedida del suizo
El mundo del tenis está un tanto triste por la retirada deportiva de uno de sus mejores deportistas en toda la historia junto con Rafa Nadal, hablamos de Roger Federer. El tenista suizo dijo adiós al deporte blanco en la Laver Cup que se desarrolló en Londres. Allí junto con su amigo y rival de toda la vida, se enfrentaron ante la pareja norteamericana conformada por Sock y Tiafoe.
Una vez finalizado el partido, el tenista suizo se despidió de todos los presentes en O2 Arena, y de paso envió un mensaje emotivo a todos los aficionados del tenis mundial. Las palabras de Federer hicieron que Nadal rompiera en llanto y que dicha imagen se hiciera icónica, pues se trata de dos de los mejores tenistas en la historia.
Rafa Nadal revela que le tiene un apodo a Roger Federer
El de Manacor reveló en medio de una entrevista para un medio local, que la despedida de su amigo y rival eterno significa bastante para él. “Como todo, tiene sus etapas. Ha sido una relación que desde el principio fue buena y que, con el paso de los años, se ha fortalecido aún más. Las personas normales aprecian al rival, siempre y cuando sea buena gente. Con los años uno se va dando cuenta de que en lo nuestro se ha vivido algo especial. Así lo hemos vivido nosotros y también lo ha percibido así el mundo del tenis”.
En la misma entrevista, el balear reveló que a Federer le tiene un apodo desde hace varios años, el cual es “Rogelio”. Nadal no quiso abarcar en el porqué de ese mote, sino que profundizó lo que significa el suizo para él en estas dos décadas de competencia continua.
Nadal también explicó el porqué de sus lagrimas en la despedida de Roger Federer
La imagen que quedará para el recuerdo de varios aficionados al tenis mundial y las personas más cercanas a este dúo de galácticos, es donde Rafa Nadal se le ve muy emocionado y con lagrimas en sus ojos mientras que Federer se dirige al público presente emitiendo su discurso de despedida.
“Soy una persona sensible y cuando ves despedirse a alguien a quien aprecias es difícil no emocionarse. Se me fue un poquito de las manos y lo peor es que, cuando me fui a la habitación yo solo, me volví a emocionar. Era difícil que no ocurriera por todo lo que se vivió aquella noche” expresó con gran emoción Rafa Nadal.