El piloto neerlandés destaca su consistencia y la fortaleza de Red Bull en una temporada llena de retos y rivalidades
Max Verstappen ha conquistado su cuarto título mundial de Fórmula 1 y lo celebra con orgullo, destacando las dificultades de esta temporada. “No todo el mundo valoró nuestras victorias pasadas, pero este año no teníamos el coche más rápido en el 70% de las carreras,” declaró el piloto. La temporada estuvo marcada por desafíos técnicos y competitivos, pero Verstappen destacó la fortaleza del equipo para superar las adversidades.
El neerlandés reconoció la presión ejercida por rivales como Lando Norris, quien complicó varias de sus carreras. “Competir contra Lando es diferente, somos amigos, pero tuvimos batallas intensas. Ganar requiere consistencia, incluso cuando no tienes el mejor coche,” comentó.
Red Bull, la lealtad de Verstappen y los planes futuros
Verstappen destacó el esfuerzo de Red Bull para revitalizar su monoplaza tras un inicio complicado de temporada. “El equipo no se rinde, incluso en los momentos más difíciles. Estoy orgulloso de cómo nos mantuvimos unidos,” afirmó. A pesar de las tensiones internas entre Horner y su padre, Jos Verstappen, el piloto mostró tranquilidad y determinación, centrándose únicamente en la competición.
El campeón también habló sobre su futuro en la Fórmula 1 y su compromiso con Red Bull. “Soy leal al equipo, me dieron la oportunidad en F1 cuando estaba en F3. Afrontamos juntos los momentos duros y seguimos avanzando,” expresó. Aunque reconoce que el número de títulos no es su prioridad, siente curiosidad por ver cómo evolucionará el equipo en los próximos años, especialmente con el coche de 2025 en desarrollo.
Reflexión sobre su legado y sus próximos desafíos
Con cuatro campeonatos mundiales en su haber, Verstappen ya es considerado uno de los grandes de la Fórmula 1. “Estoy orgulloso de lo que hemos logrado. No importa si son cuatro o siete títulos, lo importante es disfrutar del camino,” dijo. Además, subrayó su crecimiento como piloto en los últimos años, lo que le ha permitido adaptarse mejor a diferentes condiciones y desafíos.
Max cierra esta etapa con entusiasmo, dispuesto a disfrutar de su éxito antes de mirar hacia el futuro. “Hemos demostrado que podemos ganar incluso sin el coche más rápido. Ahora quiero celebrar este logro y prepararme para lo que viene,” concluyó el piloto, consolidando su lugar entre los mejores de la historia del automovilismo.