El modelo se ha convertido en uno de los más buscados de la actualidad
Cuando hablamos de una furgoneta funcional y práctica, muchos pensamos en la Citroen Jumpy. Una opción de primer nivel para los que quieren utilizar este vehículo como método de trasporte de mercancía, pero sin dejar también de contar con un coche práctico para el día a día. Y es que aunque sabemos que el Citroen Jumpy es un vehículo comercial, también es polivalente.
Para este 2020, el Citroen Jumpy ha conseguido renovarse por completo para conseguir dominar un mercado concurrido, al que acuden numerosos profesionales cada año. Es por ello que la marca sabe a la perfección que es necesario cambiar muchos detalles para alcanzar la excelencia en la versión de este año.
La longitud de esta nueva versión es de 4,95 metros, lo que da mucho más espacio tanto para la mercancía, como si queremos contar con más personas. Y es que apenas caben dos dentro de la cabina de conducción. También contamos con una versión XS y M con unas medidas mucho más limitadas.
El interior del Citroen Jumpy cuenta con un diseño básico, sin demasiadas florituras, pero que termina siendo una fórmula muy accesible en la relación calidad-precio. No cuenta con muchos extras de serie, aunque hablamos de algo normal en este tipo de coches del segmento.
Conducir este nuevo Jumpy es cómodo, así como nos permite un rendimiento de primer nivel, ya por encima de las 1000 rpm. En dichas rpm, encontramos bastante elasticidad, junto con el sistema Start and Stop. Todo ello nos ofrece una garantía de 120km/h sin ningún tipo de problema, es que el coche se mantiene liviano, todo ello con un coste de unos 6 litros cada 100 kilómetros.
El precio del Citroen Jumpy a una versión mediana con extras sería de unos 17.500€. Un precio algo por encima de su gran competencia, el Dacia, que sigue siendo un rival importante para luchar por el liderato.
