La estrategia de Fernando Alonso, explicar el uso de neumáticos blandos durante el GP de China
Durante el reciente Gran Premio de China, Fernando Alonso enfrentó una estrategia significativa que lo obligó a cambiar a neumáticos blandos a mitad de carrera. El piloto de Aston Martin inició la competencia con un juego de neumáticos medios y después de 11 vueltas cambió a duros.
La intervención del coche de seguridad, necesaria para remover el Sauber de Valtteri Bottas del circuito, complicó aún más las cosas para Alonso. La estrategia del equipo Aston Martin se vio forzada a adoptar una táctica de tres paradas, lo que resultó en una caída de la quinta a la duodécima posición, aunque Alonso logró recuperarse hasta terminar séptimo, consiguiendo además el punto extra por la vuelta rápida.
Desafíos y decisiones críticas bajo presión
“No teníamos más neumáticos duros. Teníamos uno blando y uno medio y 35 vueltas por delante que, en nuestros cálculos, no era posible llegar al final”, explicó Alonso. Esta situación lo obligó a adoptar una estrategia que no era ideal, pero era la única viable bajo las circunstancias. “Me sentía rápido, pero las posiciones no parecían buenas cuando estaba décimo. Era difícil y era la única estrategia que podíamos hacer”, añadió.
El director del equipo Aston Martin, Mike Krack, reconoció que la alta degradación de los neumáticos en la carrera sprint había sido una preocupación adicional que los llevó a tomar la decisión de las tres paradas. “Pensamos que probablemente era mejor utilizarlo, porque teníamos un nuevo neumático blando restante. Era un poco arriesgado”, comentó Krack sobre el momento crítico en que decidieron cambiar la estrategia de Alonso.
Evaluación de la carrera y perspectivas futuras
La decisión estratégica, aunque no ideal, permitió a Alonso mostrar su habilidad para manejar situaciones complicadas en la pista, demostrando su capacidad para adaptarse y competir bajo presión. A pesar de los desafíos, Alonso y su equipo lograron limitar los daños y asegurar puntos valiosos para el campeonato.
“Se trataba de limitar los daños. En general, si nos fijamos en el ritmo del coche, que no fue lo suficientemente bueno en la carrera, el resultado óptimo sin el coche de seguridad habría sido quizás sexto. Ahora hemos terminado séptimos con la vuelta rápida. Limitación de daños“, concluyó Krack.