Descubierto el uso ilícito de escáner RFID
En un giro de los acontecimientos durante la ronda de clasificación de la Fórmula E en Portland, Oregón, el equipo DS Penske se encontró en el centro de un escándalo de espionaje tecnológico. El equipo fue sorprendido instalando un escáner RFID en la entrada del pit lane, un dispositivo capaz de recoger datos en vivo de los neumáticos de otros vehículos. Como resultado, los comisarios de la FIA impusieron una multa de €25,000 al equipo, y sus pilotos, Stoffel Vandoorne y Jean-Éric Vergne, fueron sancionados con una salida desde el pit lane en la próxima carrera.
Espionaje tecnológico para una ventaja injusta
Los chips RFID son una parte integral de la Fórmula E desde sus inicios, principalmente utilizados para rastrear el estado de los neumáticos, incluyendo temperatura y presión. Sin embargo, la utilización de un escáner RFID por parte del DS Penske llevó este seguimiento a un nivel prohibido y potencialmente desleal.
De acuerdo con la explicación proporcionada por los comisarios de la FIA, la instalación del escáner por parte de DS Penske estaba en violación de las reglas que prohíben a los competidores instalar cualquier equipo en el pit lane. Además, la recolección de datos de esta manera proporcionaría al equipo una cantidad significativa de información, otorgándoles una ventaja injusta.
Transición a nuevos neumáticos Hankook iON
Esta temporada, la Fórmula E cambió a un nuevo diseño de coche “Gen 3” y a un nuevo fabricante de neumáticos, pasando de Michelin a Hankook iON. Esto ha presentado un desafío considerable para los equipos, ya que han tenido que adaptarse a las nuevas condiciones de los neumáticos.
Antes de este cambio, los equipos de la Fórmula E habían estado utilizando los mismos neumáticos Michelin durante las ocho temporadas anteriores. Por lo tanto, se puede entender que la adaptación a los nuevos neumáticos Hankook iON ha sido un proceso complicado, y que la obtención de datos adicionales sobre cómo estos neumáticos están funcionando en otros coches podría ser invaluable.
Las repercusiones para DS Penske y el mundo de la Fórmula E
El escándalo del DS Penske ha sacudido el mundo de la Fórmula E, llamando la atención sobre las tácticas que los equipos pueden estar dispuestos a utilizar para obtener una ventaja. El castigo para DS Penske ha sido severo: una multa monetaria significativa y la imposición de una sanción a sus pilotos que podrían afectar su desempeño en la próxima carrera.
Este incidente también plantea preguntas sobre cómo la Fórmula E puede prevenir tales tácticas en el futuro. Si bien las reglas actuales prohíben explícitamente la instalación de equipos en el pit lane, está claro que la tentación de utilizar la tecnología para obtener una ventaja puede ser demasiado grande para resistir para algunos equipos.
Finalmente, el uso de escáneres RFID y otras tecnologías para recoger datos en vivo sigue siendo un tema de debate en el mundo de las carreras de motor. Si bien estos dispositivos pueden ofrecer una gran cantidad de información útil, también deben ser utilizados de una manera que sea justa y dentro de las reglas del deporte. De lo contrario, la integridad de las carreras puede verse comprometida.
La Fórmula E se encuentra ante un escenario de creciente complejidad tecnológica, donde la frontera entre la ventaja competitiva y la deslealtad parece cada vez más borrosa. A medida que el campeonato evoluciona y la tecnología avanza, será imperativo encontrar un equilibrio entre permitir la innovación y garantizar la equidad en la pista. El incidente de DS Penske sirve como un potente recordatorio de este desafío y, con suerte, como una lección aprendida para todos los involucrados en la Fórmula E.
