El equipo de rojo traerá unas nuevas especificaciones realmente innovadoras para asaltar los puestos de cabeza
Ahora que la Fórmula 1 vuelve tras este parón obligatorio a causa de la pandemia del coronavirus, se espera que lo haga en el circuito del Red Bull Ring, en Austria el primer fin de semana de julio, equipos como Ferrari tienen la oportunidad de volver por sus fueros y conseguir un coche a la altura para plantar cara.
Es así que, como conocimos al principio durante los días la pretemporada, a Ferrari se le vio como un coche inestable en curvas, no lo suficientemente rápido, faltos de velocidad y, sobre todo, con la sensación de que Mercedes y Hamilton le van a mojar la oreja este año, que vuelve a comenzar. Es por eso que los de Maranello han empezado a tomar medidas.
Con el primer y único objetivo de superar lo que fue el nacimiento de un coche con poco que rascar y plantar la mejor de las caras a los todopoderosos Mercedes, así como superar a Red Bull Honda, con Max Verstappen a la cabeza. De este modo, el equipo del que será parte Carlos Sainz el próximo 2021, se ha referido a su motor.
Los técnicos de la Scuderia volverán a poner sus manos en el SF1000, donde ahora veremos un monoplaza que será bien distinto del de Albert Park. El monoplaza italiano saldrá a pista en Spielberg con el motor 065 evolución 2, con una pre-cámara de combustión que puede trabajar a más altas temperaturas, ganando así unos 15 CV.
Estos podrían devolverle a Ferrari aproximadamente la potencia que se ha perdido debido a los controles en el flujo de combustible. También, la atención principal estará sobre la transmisión, quienes han hecho un cambio extremo este año, buscando más ligereza, y, sobre todo, miniaturizando la caja de carbono para favorecer la aerodinámica; los datos dirán pero se espera un gran salto por su parte.
