El británico deja el Ineos y se une al Q36.5, marcando una tendencia en el ciclismo profesional
El fichaje de Tom Pidcock por el Q36.5 Pro Cycling Team ha sacudido el panorama ciclista. Tras cuatro años con el Ineos, el británico abandona el equipo WorldTour debido a desacuerdos que culminaron con su exclusión del Giro de Lombardía. Pidcock, de 25 años, afronta un cambio significativo al unirse a una escuadra de categoría Pro Team.
Este movimiento refleja una tendencia creciente en el ciclismo, donde corredores en plena forma, como Pidcock, buscan nuevos retos en equipos de menor categoría. Junto a él, figuras como Marc Hirschi y Julian Alaphilippe también han optado por cambios similares, trasladándose al equipo Tudor, lo que deja en el aire la participación de estos conjuntos en competiciones como el Tour de Francia.
La batalla por las invitaciones al Tour de Francia 2025
El Q36.5, con Pidcock como su principal figura, y el Tudor, reforzado con Alaphilippe, se perfilan como candidatos a las invitaciones para el próximo Tour de Francia. Ambos equipos, bien posicionados en el ranking UCI, se disputarán un cupo en la prestigiosa competición.
Sin embargo, la decisión no será sencilla para los organizadores. Equipos como el TotalEnergies, con su estatus de escuadra Pro Team francesa, tienen prioridad, mientras que Uno-X, habitual en las últimas ediciones, también busca mantener su lugar. El dilema radica en elegir entre el impacto mediático de estrellas como Pidcock y Alaphilippe o la consistencia de otros equipos.
Un panorama incierto para las escuadras Pro Team
La competencia por participar en las grandes vueltas evidencia el creciente nivel de los equipos de segunda división. Q36.5 y Tudor representan un nuevo enfoque en el ciclismo, apostando por atraer talentos reconocidos y generar impacto global. Esta estrategia no solo busca resultados deportivos, sino también consolidarse como marcas en el mundo del ciclismo.
Con Pidcock a la cabeza, el Q36.5 enfrenta un desafío emocionante. El británico será clave para elevar el nivel competitivo del equipo en su nueva etapa. La lucha por un lugar en el Tour y su desempeño en otras competiciones definirán el éxito de esta arriesgada apuesta.
