Un final de infarto en Dijon
Dylan Groenewegen se ha alzado con la victoria en la sexta etapa del Tour de Francia en un final que necesitó la revisión de la fotofinish. El ciclista neerlandés, nacido en Ámsterdam, superó a Jasper Philipsen en se llevó el triunfo por un estrecho margen.
La sexta etapa, que condujo a los ciclistas desde Mâcon hasta Dijon, ofreció numerosas oportunidades para los velocistas. Con 163 kilómetros por recorrer, la única subida del día se presentó apenas en los primeros diez kilómetros, dejando el resto del trayecto principalmente llano y favorable para una llegada en grupo.
Una etapa llena de oportunidades para los sprinters
Tras la temprana subida y el sprint intermedio, la etapa transcurrió de manera relativamente tranquila. El pelotón, compuesto por equipos de clasificación y escuadrones de velocistas, se mantuvo compacto durante la mayor parte del recorrido. Aunque hubo algunos intentos de escapada, ninguno logró consolidarse, y conforme los ciclistas se acercaban a Dijon, la posibilidad de una llegada masiva se hacía cada vez más evidente.
Mads Pedersen sorprendió a muchos al obtener el tercer lugar en el sprint intermedio, demostrando su resistencia y capacidad de recuperación después de su caída en la quinta etapa. A pesar de sus lesiones, Pedersen logró mantenerse competitivo y sumar quince puntos en el sprint, mientras que Jasper Philipsen se llevó los veinte puntos del primer lugar.
El sprint final y la caída de Marijn van den Berg
Con el final de la etapa acercándose, la tensión aumentó. Ciclistas como Nils Politt y Jan Tratnik intentaron adelantarse al pelotón en los últimos kilómetros, pero fueron rápidamente neutralizados. La pregunta en la mente de todos era quién sería el mejor sprinter del día.
A siete kilómetros de la meta, Marijn van den Berg sufrió una caída que lo dejó fuera de la contienda, eliminando una amenaza potencial para los demás velocistas. El nerviosismo y la estrategia de posicionamiento en el pelotón alcanzaron su punto máximo mientras se acercaban a Dijon.
Finalmente, Dylan Groenewegen demostró su capacidad y experiencia en los últimos metros, adelantando a Jasper Philipsen justo en la línea de meta. La victoria, determinada por una fotofinish, subraya la competitividad y emoción de esta edición del Tour de Francia.
La etapa de hoy no solo ha sido un espectáculo de velocidad y estrategia, sino también una demostración de la resistencia y determinación de los ciclistas. Con cada etapa, la lucha por el maillot amarillo y las victorias individuales se intensifica, prometiendo más momentos memorables en los días venideros.