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Ultimátum de Doncic a Dallas con Los Warriors muy atentos

El esloveno no ha tenido las mejores sensaciones con su equipo y compañeros

El balance que acumulan los Dallas Mavericks con Luka Doncic en este inicio de temporada con cinco victorias y tres derrotas puede llamar a engaño y sin duda, los Golden State Warriors están a la expectativa de lo que pueda pasar con el famoso jugador que no tiene las mejores sensaciones.

Y es que a pesar de ser terceros en el Oeste y de acumular dos triunfos consecutivos, las sensaciones que acompañan a Luka Doncic y al equipo texano siguen sin ser las más adecuadas. Sus cinco victorias han llegado ante equipos teóricamente inferiores como lo son los Spurs, Kings, Rockets y Raptors.

Luka Doncic y un momento complejo

Los Golden State Warriors a la expectativa de lo que pueda pasar con Luka Doncic

Ante los Spurs, a pesar de terminar ganando el choque y del buen partido de Jalen Brunson, el conjunto texano volvió a mostrar las carencias. La llegada de Jason Kidd al banquillo no ha supuesto ninguna novedad con respecto a lo que planteaba Carlisle y el equipo sigue dependiendo en exceso del talento del esloveno.

El esloveno no es la única estrella que está teniendo problemas desde la larga distancia en este inicio de temporada. Jugadores fiables como Lillard están penando desde el triple con un 23%, el porcentaje más bajo de la historia tras los siete primeros partidos de la temporada apenas un 2% más que Luka.

El conjunto de los Mavs pasa por una de sus crisis más fuertes 

Todo lo contrario que pasa en los Mavericks sucede en los Warriors, que a pesar de la ausencia de Klay Thompson pueden permitirse que Stephen Curry tenga un mal partido como sucedió ante los Hornets. Golden State consiguió su sexta victoria de la temporada y se ha encaramado a lo más alto del Oeste.

Esto fue en una noche en la que su estrella se humanizó, pero en la que secundarios como Jordan Poole o Gary Payton II asumieron el testigo de un conjunto que empieza a dar miedo. Y además lo hace con un rating defensivo de 97,8, el más bajo de la NBA.