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Saltan las alarmas en el Bilbao Basket

El Bilbao Basket enfrenta una racha negativa en ataque y defensa que preocupa a su afición y cuerpo técnico

El Bilbao Basket atraviesa una crisis en la Liga Endesa tras acumular cinco derrotas consecutivas. El equipo, que inició la temporada con un balance aceptable de 3-3, ha visto un deterioro significativo en su rendimiento. Tanto el ataque como la defensa han mostrado una clara regresión, una tendencia que enciende las alarmas en la entidad vasca.

Los problemas defensivos son especialmente preocupantes, con un aumento del porcentaje de acierto en tiros de dos puntos de los rivales, que ha pasado del 47,5% al 54,2%. Este incremento revela un debilitamiento estructural en su sistema defensivo, anteriormente liderado por Hlinason.

A esto se suma una baja efectividad ofensiva, que impide al equipo competir al nivel necesario en una liga tan exigente.

Las claves de la crisis: problemas defensivos y falta de ajustes tácticos

Uno de los aspectos que más destacan en esta mala racha es la pérdida de solidez defensiva, un pilar que había sido fundamental al inicio de la temporada. Hlinason, señalado por Pedro Martínez como pieza clave en la defensa del Bilbao Basket, no ha podido sostener el mismo nivel. La estructura defensiva del equipo parece haberse debilitado, permitiendo más penetraciones y tiros fáciles para los rivales.

En el aspecto ofensivo, los problemas también son evidentes, con una disminución en la efectividad de sus jugadores clave. Sin una ofensiva consistente, el equipo encuentra dificultades para mantenerse en los partidos. Esta combinación de carencias en ambos lados de la cancha ha llevado a una dinámica de derrotas que amenaza con complicar los objetivos del club.

Bilbao Basket debe reaccionar para evitar mayores consecuencias en la Liga Endesa

El equipo necesita ajustes urgentes tanto en el plano táctico como en el mental para revertir esta situación. La dirección técnica tendrá que trabajar en soluciones que permitan recuperar la solidez defensiva y mejorar la eficiencia en ataque. Los próximos partidos serán cruciales para determinar si el Bilbao Basket puede romper esta racha negativa y volver a la senda de la victoria.

Además, la gestión del vestuario será fundamental para mantener la motivación del equipo en medio de la adversidad. Los jugadores clave, como Hlinason, deberán asumir un papel protagónico en esta fase crítica. La reacción inmediata es imprescindible para evitar consecuencias mayores y mantenerse en la lucha por los objetivos de la temporada.

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