Los entrenamientos comienzan sin históricos como Rudy y el Chacho, mientras se considera un último fichaje
El Real Madrid de baloncesto inicia esta semana su tercera temporada bajo la dirección de Chus Mateo, enfrentándose a un panorama de importantes cambios en su plantilla. La pretemporada comenzará con los tradicionales reconocimientos médicos, seguidos de los primeros entrenamientos, en los que no estarán presentes figuras históricas como Rudy Fernández y Sergio Rodríguez, quienes han puesto fin a sus legendarias carreras con el club.
El equipo blanco es el último de los 18 conjuntos de la Liga Endesa en comenzar la pretemporada, y junto al UCAM Murcia, el único que aún no ha disputado ningún amistoso. El primer test será este sábado 7 de septiembre contra el Benfica en Badajoz, donde los aficionados podrán ver por primera vez a un Real Madrid con muchas caras nuevas, aunque manteniendo la base que ha caracterizado al equipo en los últimos años.
Nuevas incorporaciones y la posibilidad de un último refuerzo
El verano ha traído movimientos significativos para el Real Madrid. A diferencia del mercado anterior, que solo vio la llegada de Facundo Campazzo, este año el club ha incorporado cuatro nuevos jugadores y ha despedido a seis. Serge Ibaka y Usman Garuba, dos viejos conocidos de la afición, regresan para fortalecer la rotación interior. Además, la dirección del equipo se refuerza con Andrés Feliz, uno de los mejores bases de la ACB, y Xavier Rathan-Mayes, máximo anotador de la liga rusa la pasada temporada, quien se espera revolucione el juego de la segunda unidad.
Entre las bajas, destacan las de Rudy Fernández y Sergio Rodríguez, quienes se despiden tras años de éxitos. Fabien Causeur también ha dejado el equipo para unirse al Armani Milán, y con él se van los otros dos jugadores franceses: Vincent Poirier, que jugará en el Anadolu Efes, y Guerschon Yabusele, quien probará suerte nuevamente en la NBA con los Philadelphia 76ers. Carlos Alocén es la otra baja significativa, tras no lograr recuperar su protagonismo en el equipo debido a una grave lesión de rodilla; ahora buscará minutos en el Dreamland Gran Canaria.
El imprevisto adiós de Yabusele y la posibilidad de un nuevo fichaje
La salida de Yabusele, una de las más inesperadas, ha abierto la puerta a la posibilidad de un último refuerzo en la plantilla. El ala-pívot francés dejó el equipo tras un destacado torneo olímpico que le valió un regreso a la NBA, con los 76ers pagando su cláusula de 2,5 millones de euros. Esta baja ha generado la necesidad de reforzar la posición de ala-pívot, donde ahora se turnarán Gabriel Deck, Mario Hezonja, y los más bajitos Usman Garuba y Eli Ndiaye.
Uno de los nombres que suena con fuerza para cubrir esta posición es el del letón Davis Bertans. Con 31 años y 2,08 metros de altura, Bertans es un tirador experto que parece haber perdido su lugar en la NBA, y su incorporación podría ser clave para abrir la cancha y complementar la estrategia del equipo con su excelente tiro exterior.