El base de los Toronto Raptors está en su última temporada de contrato y le gustaría jugar en su ciudad natal
En el día de ayer, los Sixers de Simmons y Embiid, en medio de los rumores sobre la posible llegada de Lowry, se impusieron a los Dallas Mavericks de Doncic. Un partido que confirma que los de Philadelphia son uno de los grandes favoritos para optar al anillo de la NBA.
Después de años en reconstrucción, al fin llegó ‘El Proceso’. Simmons y Embiid al fin supusieron dos grandes aciertos en el draft y volvieron a colocar a la franquicia entre las mejores de la NBA. Sin embargo, en los últimos años no han tenido gran éxito, sobre todo tras la famosa canasta de Kawhi Leonard.
Los Sixers de Embiid, candidatos al anillo
La presente temporada, la primera don Daryl Morey al frente de las operaciones del equipo, y de Doc Rivers en el banquillo, no está defraudando. Y es que han pasado de una temporada nefasta a ser primeros en el este con un Embiid estelar como principal candidato al MVP de la temporada.
El jugador camerunés ha asumido galones, tanto en ataque como en defensa, y al fin está teniendo una temporada sin lesiones. Ahora, unidos a un gran Simmons y un gran Tobias Harris, han conseguido formar un bloque muy bueno, tanto en el apartado ofensivo como en el defensivo.
Lowry, el gran objetivo de los Sixers
Sin embargo, y pese a contar con uno de los mejores big-three de la liga, aún podría llegar una nueva estrella. Esa estrella sería Kyle Lowry, el mejor jugador de la historia de los Toronto Raptors por su tiempo en el equipo y por su anillo de campeón siendo un jugador esencial.
El base, nacido en Philadelphia, afronta su última temporada de contrato y todo apunta a que saldrá del equipo. Su destino favorito son los Sixers, donde estaría con otras tres grandes estrellas de la liga. Allí, en su ciudad, podría ganar su segundo campeonato, aunque Daryl Morey tendría que dar a cambio a alguna de sus jóvenes promesas como Maxey.