Las altas exigencias económicas podrían truncar su vuelta
Una de las series de televisión más exitosas de todos los tiempos, Friends, sigue vivita y coleando más de un cuarto de siglo más tarde de la emisión de su primer episodio. Esto no es más que el reflejo de cuánto tiempo puede seguir resonando un gran éxito televisivo si tiene los ingredientes adecuados.
Para plantarle cara a Netflix, al temido por toda la competencia Disney + y al creciente éxito de Amazon Prime, HBO ha tenido que reinventarse (especialmente desde que terminase su mayor éxito, Juego de Tronos) y para ello se prepara para el lanzamiento de HBO Max, una nueva plataforma que mejora la que ya conocemos.
Como gran bombazo de lanzamiento, los productores de HBO Max (con Warner Bros a la cabeza) anunciaron que tendrían una especie de regreso de Friends, que no sería una continuación de la serie, sino conversaciones informales entre los protagonistas en un ámbito sin guión, algo que llama la atención de los fans igualmente.
Sin embargo, no todo es tan fácil como parecía. Hay un pequeño fallo, uno habitual, el dinero. Los protagonistas de Friends no baja su caché con el paso de los años (todos siguen actuando de una manera u otra) y pretenden unos honorarios en torno a los diez millones de dólares por cabeza, algo que Warner Bros no está dispuesta a asumir.
Eso tampoco significa que haya una cancelación absoluta, las negociaciones entre ambas partes siguen y, como dice Kevin Reilly, jefe creativo de HBO Max, “Hay interés por todas las partes, pero no podemos poner en sintonía los intereses de todos para presionar el botón. A día de hoy es solo un quizás”