El futuro del murciano es una de las grandes incógnitas para la temporada 2026 de MotoGP
Para la temporada 2026 el mercado de fichajes se encuentra bastante complejo. Y es que la gran cantidad de movimientos en la mayoría de escuderías y el contrato de muchos pilotos hace que muchos de ellos terminen al final de la próxima temporada y este podría ser el caso en específico de Pedro Acosta y Ducati.
Y es que se ha conocido que Pedro Acosta tiene toda la intención de cambiar de aires y una de sus mayores opciones es tener a Ducati en sus objetivos. A nadie se le escapa que Acosta es una de las perlas más cotizadas del mercado. Por eso, pese a que todavía estamos en pleno mes de abril ya se piensa en su futuro.

El piloto de KTM ha logrado cosechar grandes triunfos desde muy joven
Además que para nadie es un secreto que Acosta le debe su éxito a KTM y, por ello, su sueño más grande siempre ha sido devolvérselo en forma de título mundial de MotoGP. Cabe recordar que fue campeón del mundo de Moto3 como rookie, campeón del mundo de Moto2 en su segundo año y debut en MotoGP con 19 años. Todo ello de la mano de KTM.
Sin embargo, Honda sabe que la frustración de Acosta va creciendo y quiere sacar provecho de ello. Hace algo más de una semana, Speedweek revelaba que la marca nipona habría hecho una jugosa oferta al español: tres temporadas a razón de 10 millones de euros por cada una. Pero se ha conocido que el español tiene motivos más fuertes para llegar a Ducati.
La opción más llamativa que tiene Pedro Acosta y que involucra directamente a Ducati
Y es que la única posibilidad para ser campeón del mundo de MotoGP es pilotar una Ducati Desmosedici. La brecha entre la marca de Borgo Panigale y las demás no ha hecho más que crecer desde que pusieron en pista la GP24. Una moto tan perfecta que ni ellos mismos han sido capaces de hacer una mejor de cara a este curso.
Por eso, siendo su plan A quedarse en KTM, la opción más rápida de llegar a lo más alto del podio pasa por conseguir una Ducati. Y para 2026 solamente hay una libre: la de Franco Morbidelli. Y claro, a nadie se le escapa lo épico que resultaría que Pedro Acosta se proclamase campeón del mundo batiendo al 93 con los colores del equipo de Valentino Rossi.