Mientras el calendario de la Fórmula 1 avanza, el asturiano demuestra que sigue siendo un valor seguro dentro y fuera de la pista
En un momento en el que muchos comienzan a hablar de retiro, Fernando Alonso vuelve a dejar claro que no está ni cerca de abandonar la batalla. Su contrato con Aston Martin vence al final de 2025, pero el piloto español ya ha dado señales de querer alargar su carrera si el monoplaza evoluciona al nivel que exige su ambición. Las recientes conversaciones con el equipo británico apuntan a una posible renovación, y todo indica que la llegada de Adrian Newey podría marcar un antes y un después.
Lejos de conformarse con su legado, Alonso mantiene viva la ilusión de alcanzar ese ansiado tercer campeonato. La escudería lo sabe, su presencia no solo eleva el rendimiento en pista, sino que también aporta experiencia, liderazgo y presión competitiva interna. En un calendario cada vez más exigente, el bicampeón del mundo se mantiene como uno de los activos más valiosos dentro del paddock, tanto por su capacidad técnica como por el peso de su nombre.
Respaldo de leyendas mientras la edad deja de importar
La duda sobre si Alonso debería continuar encuentra su réplica en figuras legendarias del automovilismo. En los Premios Laureus 2025, Emerson Fittipaldi dejó claro que el asturiano tiene lo necesario para seguir compitiendo al más alto nivel. “Está física y mentalmente impecable. Si le das un coche competitivo, aún puede ganar”, afirmó el brasileño, desmontando el argumento de la edad como obstáculo real.
Fittipaldi también subrayó la influencia que podría tener Newey en el futuro técnico de Aston Martin, algo que entusiasma a Alonso. Según él, no es una cuestión de nostalgia, sino de competitividad real, si el coche rinde, el español será protagonista. En ese sentido, Fernando no busca una despedida digna, sino una última oportunidad de gloria.
Mclaren tienta al asturiano con un nuevo reto en resistencia
Mientras tanto, el futuro podría dibujarse en otras pistas. De no conseguir un monoplaza ganador, McLaren ya se ha adelantado con una propuesta atractiva, formar parte del equipo de resistencia para las 24 horas de Le Mans. Un posible regreso a la escudería con la que compartió años intensos en la F1, esta vez en un escenario distinto, pero con el mismo objetivo, ganar.
Zak Brown quiere contar con un piloto que combina experiencia, precisión y pasión por competir. Para Alonso, aceptar ese reto sería dar continuidad a una carrera que se resiste a apagarse. Aunque aún mantiene la mente puesta en la F1, su versatilidad lo convierte en uno de los últimos grandes gladiadores del automovilismo moderno. Y pase lo que pase, seguirá dando titulares.
