Tras el partido, Marcelino García Toral no ocultó su enojo y arremetió contra el VAR, criticando duramente la decisión del árbitro Figueroa Vázquez
El Villarreal salió de La Cerámica con un empate agridulce ante el Getafe en un encuentro que acabó con polémica. El técnico Marcelino García Toral no escondió su frustración en la rueda de prensa posterior al partido, apuntando directamente contra la gestión del VAR. En sus declaraciones, subrayó que su equipo merecía más y que la intervención del colegiado en el VAR, Figueroa Vázquez, fue injustificada. La jugada que detonó su enfado fue un penalti sancionado sobre Raúl Albiol por una supuesta falta sobre Bertug, que Marcelino calificó como “una decisión ridícula”.
“Estamos contrariados porque merecíamos ganar y perdemos los puntos por una decisión incomprensible”, comentó el entrenador, visiblemente molesto. Según su perspectiva, la actuación del árbitro principal, García Verdura, era adecuada hasta que el VAR intervino para revisar la jugada. Marcelino insistió en que la llamada del VAR obedeció más al afán de protagonismo que a la búsqueda de justicia deportiva.
El árbitro del VAR está descendido porque no es muy bueno
Marcelino fue contundente al criticar a Figueroa Vázquez, insinuando que su descenso a Segunda División se debía a su bajo rendimiento. “Si en vez de un árbitro joven hubiera sido uno más experimentado, no habría llamado al principal”, sentenció. El técnico también fue sancionado con tarjeta amarilla por reclamar al árbitro, algo que él mismo justificó. “Solo le pedí que actuara con personalidad; ese penalti no se puede pitar en cada partido porque arruinaría el fútbol”.
El enfado del entrenador del Villarreal no se limitó a los árbitros. En la conferencia también destacó el nivel del Getafe y reconoció que fue un rival complicado. A pesar de que su equipo tuvo oportunidades para sentenciar el encuentro, la falta de precisión y las buenas intervenciones de David Soria evitaron que se ampliara la ventaja. “Tuvimos el 2-0 en la segunda mitad, pero no lo logramos. El Getafe nos puso en aprietos y aprovechó esa única acción que nunca entenderé”, añadió.
El VAR modificó el resultado y eso duele
El técnico insistió en que su frustración proviene de la interferencia innecesaria del VAR, ya que, según él, la jugada no era determinante. “El árbitro estaba bien colocado y la jugada no era relevante. Esta decisión va en contra del fútbol”, afirmó. Marcelino también destacó que su malestar no era solo por el penalti en sí, sino por cómo afecta la dinámica del deporte: “Este tipo de decisiones no pueden marcar partidos tan intensos como el de hoy”.
Cerró su intervención con un tono serio, reafirmando su disgusto: “Me duele más el empate por cómo se dio que por el resultado en sí. A veces parece que algunos árbitros buscan protagonismo cuando ya no lo tienen en el campo”. Con estas declaraciones, dejó claro que su descontento no se limitará a la rueda de prensa y que espera más consistencia en las futuras actuaciones arbitrales.