La idea es hallarle espacio, hacer que se sienta a gusto y recuperarle como el lateral que es
No es para nada la situación que esperaría estar viviendo Alberto Moreno en esta etapa de su carrera profesional. Su fichaje por el Villarreal se ha dado en todo margen como una jugada con bastante ilusión, pero el legado de las lesiones no ha dejado de ser para él un problema. Hoy se entiende el porqué no ha podido actuar esta temporada, dejando eso como gran efecto en su salida del submarino amarillo.
La directiva ha analizado muy bien su caso, y tomando decisiones parece que ha llegado el momento. No le quieren más en el club, pero van a facilitar la tarea de búsqueda del equipo, entrando en detalles directamente con el futbolista que estuvo en el club amarillo por voluntad en una desesperada por la mala situación vivida en Inglaterra.
Regresar a casa, una de las ideas planteadas que ha generado conmoción en la vida de Alberto Moreno
Pues bien, inmediatamente expuesta esta posibilidad ha aparecido el Sevilla FC. Los andaluces han sido los primeros en aparecer, su idea es tratar de sumar efectivos en esa zona, entendiendo que Escudero termina su contrato a mitad de año y se irá. Además, Rekik que en un comienzo fue firmado para cumplir esa tarea viene jugando más de central.
El tema deja solo a Marcos Acuña, un jugador que ha sorprendido pero que por obvias razones no va a poder jugarlo todo, y menos con el cupo a Champions atado de pies y manos. Así que de inmediato el tema fue escalado, y se ha empezado a trabajar de la mano de Monchi. El encargado de las riendas deportivas del club de Nervión está convencido y así se lo han hecho saber.
Más allá del contrato el valor es una verdadera ganga
Analizando todo se ha podido conocer que Alberto Moreno tiene contrato vigente hasta 2024. Pero valorando la postura de los dos por abrir la persiana su valor de salida rondará los 5 millones de euros. Para la gente en Sevilla es una verdadera invitación, más por tratarse de un futbolista criado en su ambiente, que conoce a la perfección lo que es jugar allí y quiere a la institución.
Es la medida precisa, y todos lo tienen claro. El ex del Liverpool podría caer de pie a pesar de todo, en Villarreal tiene pocas opciones y más allá de eso está un escalón por debajo. Las siguientes semanas serán cruciales, clubes y jugador deberán llegar a un acuerdo y estamparlo en la firma del contrato es el paso definitivo.