Baraja se convierte en la cara visible del Valencia mientras la directiva se mantiene en segundo plano
El inicio de la temporada 2024/25 no ha sido alentador para el Valencia CF. Los problemas deportivos del equipo no son más que la consecuencia de una crisis institucional y financiera que lleva años afectando al club. La afición valencianista ha llegado al límite de su paciencia con Peter Lim y la gestión del club, pero la falta de recursos para cambiar la situación genera desesperación.
Peter Lim, quien asumió el control del club en 2014, no ha visitado la ciudad desde 2019, delegando la responsabilidad en figuras como LayHoon Chan, la presidenta del club. Sin embargo, Chan tampoco se deja ver públicamente excepto en ocasiones contadas, como la Junta General de Accionistas y el cierre del mercado de fichajes. Rubén Baraja, conocido como “El Pipo”, ha tenido que asumir el papel de portavoz en muchas situaciones, ofreciendo explicaciones incluso en cuestiones que no son exclusivamente deportivas, como el caso reciente de Rafa Mir.
La crisis deportiva y la falta de apoyo desde la directiva del Valencia CF
En lo deportivo, la situación del Valencia CF tampoco mejora, con el equipo mostrando un bajo rendimiento en este inicio de temporada. Cuando los resultados no acompañan, las críticas suelen dirigirse al entrenador, pero el caso del Valencia es diferente. Baraja compite con una plantilla debilitada, en la que se ha invertido poco para reforzarla, a pesar de haber generado ingresos importantes por ventas como la de Mamardashvili. Este verano, el club apenas destinó 1,350 millones de euros en fichajes, lo que lo sitúa como el tercer club que menos invirtió en LaLiga.
A pesar de las dificultades, Rubén Baraja no ha dudado en exigir más de sus jugadores. Tras la derrota contra la Real Sociedad, se le escuchó levantar la voz: «Tenemos que espabilar, ya está bien». Sin embargo, el problema radica en la falta de implicación y recursos proporcionados desde la dirección deportiva y la mayoría accionarial, encabezada por Miguel Ángel Corona y Peter Lim.
La soledad de Baraja en la gestión de la crisis del Valencia CF
Rubén Baraja no solo ha tenido que enfrentarse a la presión del banquillo, sino que ha sido el único en dar respuestas públicas sobre la situación general del club. Mientras LayHoon Chan y Javier Solís se mantienen al margen, Baraja se ha convertido en la cara visible tanto en victorias como en derrotas. Esta carga de responsabilidad lo ha transformado en el escudo perfecto para que la cúpula de Meriton evite las críticas directas de la afición.
La crisis del Valencia CF es más que un problema de resultados; es un reflejo de una gestión ausente y desconectada de las necesidades del equipo. El Valencia CF parece estar anclado en un ciclo de autocomplacencia desde la directiva, mientras la afición espera respuestas que solo obtiene de la boca de su entrenador, el Pipo.