Dani Cuesta, hincha del Valencia, y su esposa están detenidos desde el viernes por expresar su descontento con el dueño del club
El aficionado del Valencia, Dani Cuesta, y su esposa se encuentran retenidos en Singapur desde el pasado viernes. Las autoridades les retiraron los pasaportes y los mantienen en un hotel sin permitirles salir, según fuentes cercanas al caso. La pareja deberá declarar este martes a las 15:30 hora local, sin que hasta el momento se les haya informado formalmente de los cargos en su contra.
El único “delito” que se les atribuye hasta ahora es haber protestado contra Peter Lim, dueño del Valencia CF. Dani Cuesta se hizo una foto con una pancarta que decía “LIM GO HOME” y también pegó una pegatina en la puerta de la casa del empresario con el mensaje “LIM OUT”.
Una situación de incertidumbre y temor
Las personas cercanas a la pareja han mostrado gran preocupación, ya que no conocen todos los detalles del caso ni las razones específicas de su detención. Los afectados están muy asustados, lo que ha limitado la divulgación de más información sobre el incidente. A pesar de la falta de detalles, muchos ven la situación como un claro atropello a los derechos de los aficionados por expresar su opinión.
El caso ha generado indignación entre los seguidores del Valencia, que consideran esta situación una muestra más de la represión en Singapur hacia quienes critican a figuras poderosas como Peter Lim. El temor a posibles represalias ha llevado a las personas cercanas a la pareja a mantener una postura de cautela ante los medios y las redes sociales.
El impacto de las protestas en la comunidad valencianista
La situación de Dani Cuesta ha generado un gran malestar entre la afición del Valencia, que lleva años mostrando su descontento con la gestión de Peter Lim. Las protestas contra Lim se han intensificado en los últimos meses, especialmente por la percepción de que las decisiones del empresario han afectado negativamente el rendimiento y el futuro del club. Muchos consideran que lo sucedido con Cuesta podría disuadir a otros aficionados de expresar su descontento de manera pública, especialmente en contextos internacionales.
A pesar de la distancia, la comunidad valencianista ha demostrado su apoyo a Dani Cuesta y su familia, organizando movilizaciones y expresando solidaridad en redes sociales. Los aficionados del Valencia no solo piden la liberación de Cuesta, sino también un cambio profundo en la gestión del club, ya que muchos creen que la situación actual refleja un deterioro en los valores históricos del equipo.