Corriendo fechas para la disputa de los partidos de Liga obliga a los hispalenses a jugarse una exhalación más
La tercera jornada de LaLiga Santander tendrá una dura polémica respirándole encima, se trata del acomodo de las fechas a las cuáles algunos clubes deberán respetar pese a sus compromisos externos. El duelo entre Cádiz y Sevilla es el mejor ejemplo, y más que eso, es la razón justificada de la disputa entre administraciones en el deporte.
En un comienzo el partido estaba programado para jugarse el lunes 28 de septiembre, pero el juzgado mercantil lo ha desmentido, y ha obligado a re programar la cita para el domingo en la tarde. Un día menos de descanso para el Sevilla que tendrá un durísimo examen al tener en frente al Bayern de Múnich en la final de la Supercopa de Europa.
Una emisión elimina jugar partidos los días lunes y viernes; polémica a toda luz
Esta decisión ha sido solo el comienzo de la gran disputa, un hecho mucho más poderoso que la integridad de los clubes, como es el mercadeo y la generación de ingresos ha obligado a esta postura. Los partidos de los días lunes y viernes quedan abolidos y se obliga a entablar la normalidad entre sábados y domingos.
Javier Tebas tiene mucho que ver acá, pues al estar al frente de la presidencia del torneo de fútbol principal en España, pasa por encima de algunas consideraciones mucho más demandantes y pesadas. Esto se refleja en el descontento de algunos participantes, que al igual que Cádiz y Sevilla tendrían que re programar sus itinerarios.
Trabajo extra para Lopetegui y su plantilla
Ya no hay vuelta atrás, es una decisión que golpea otros choques como el Eibar-Athletic en primera, y los Málaga-Alcorcón y Oviedo-Español de segunda categoría. Trabajo adicional para Lopetegui que tiene el duro reto de dejar una vez más el máximo trofeo de clubes de Europa en el país, para clarificar ese poderío de los últimos años.
Un día menos de descanso, y a su vez un día favorable para los rivales. De momento no hay pronunciamientos oficiales por parte de la Federación, institución de la cual se espera un pronunciamiento y obligada toma de correctivos, para perdurar en el ambiente el sano desarrollo y la sana competencia entre los asociados.
