El club gijonés se muestra algo ambicioso con las ofertas hacía su jugador
El Sporting de Gijón se ha dado el lujo de rechazar dos ofertas interesantes por su joven talento en el mediocampo. Se trata del asturiano José Gragera Amado, el cual ascendió al primer equipo hace apenas un año. El trabajo que mostró en la pasada campaña, le hizo ganar elogios de varios clubes, entre ellos el Getafe CF y el RCD Espanyol.
Precisamente estos dos equipos de primera división, han activado sus intereses y lo han materializado en forma de oferta. El problema es que ninguna propuesta llegó a impresionar a la dirección deportiva del cuadro asturiano, por lo que han preferido que el centrocampista siga en la plantilla bajo las ordenes de David Gallego.
El Sporting se reserva la caja de su talento en el mediocampo, para después
El club gijonés tiene planes a largo plazo con su mediocampista, y por ello ha rechazado las dos primeras ofertas provenientes del Getafe y Espanyol. En primer lugar hay que tener en cuenta que el centrocampista está tazado en apenas 700.000 euros, y que tiene contrato hasta 2024. Lo que le da un gran margen de maniobra al Sporting.
De esta manera la dirección deportiva liderada por Javier Rico, ha descartado la oferta del club azulón de 2.5 millones de euros por el 50% de los derechos deportivos del jugador. Luego archivó la del cuadro perico de 4 kilos por el pase total de Gragera. El plan del club asturiano es conservar al canterano, para que se siga valorizando y venderlo más adelante.
El joven talento del Sporting está blindado con 2 cláusulas altas
En el contrato del jugador quedó estipulado que en caso de que un equipo se aventure a pagar su cláusula, tendrá que abonar 10 millones de euros si es un club de segunda, y 40 si es uno de LaLiga Santander. En este caso tanto la escuadra azulona como la catalana, la tiene muy complicada, pues la operación no obedece a la realidad deportiva del futbolista.
De manera que el centrocampista y canterano gijonés pasará otra temporada bajo las ordenes de David Gallego. El míster catalán no tenía intenciones de no contar con él, y por el contrario, es una pieza que encaja a la perfección en su esquema táctico. En la pasada campaña jugó 2473 minutos repartidos en 33 partidos, donde marcó dos goles y una asistencia.