Monchi prepara una limpieza de dimensiones históricas para tratar de reconducir el curso del equipo
La operación salida que prepara Monchi en el Sevilla FC va camino de ser histórica. Una vez transcurridos varios días para asumir e interiorizar el mal comienzo, en el Sevilla FC ya son optimistas con el 2023. Creen que hay mimbres y capacidad de maniobra para dar la vuelta a la situación y afrontar todas las competiciones con mejores garantías.
Para ello es evidente que hay que hacer cambios en la plantilla. El Mundial de Qatar puede servir para relanzar al mercado a algunos jugadores que en los últimos meses no han estado a la altura. Casos como el del Papu Gómez, En-Nesyri, Acuña o Montiel. Otros que no van al Mundial pero también están en el punto de mira son Joan Jordán, Rafa Mir o el propio Iván Rakitic.
La operación salida de Monchi
Es tal la limpia que hay que hacer, que incluso se especula con la posibilidad de que directamente se rescindan algunos de los contratos más altos. Para generar fair play inmediatamente y que los jugadores en cuestión puedan negociar libremente la salida a otros clubes.
Hablamos de una operación salida que si Monchi está acertado puede incluir mínimo a 5 o 6 futbolistas. Quieren dejar hueco para hacer fichajes de rendimiento inmediato y de gran peso. Con la vuelta de Lucas Ocampos casi atada, el siguiente objetivo es una petición expresa de Sampaoli: Memphis Depay.
La guinda de Monchi para resurgir
El FC Barcelona quiere desprenderse del futbolista y Monchi hará un esfuerzo económico para llevarlo al Sevilla FC. Pero el director deportivo hispalense no está por la labor de seguir recibiendo críticas y quiere acompañar la llegada de Memphis con otra gran bomba.
En las últimas horas se sabido que Hazard abrirá la puerta a una salida, al igual que un Marco Asensio que se ha ido al Mundial sin renovar con el Real Madrid. Ambos futbolistas son muy del gusto de Monchi. El belga se ve como en su día Jovetic o Nasri. Un futbolista al que recuperar para la élite. Al español se le compara con Sarabia. Un crack en potencia. Para ello, como decíamos, es necesaria una operación salida histórica con Monchi a los mandos.
