El brasileño ya se considera uno de los fichajes más ruinosos de la era Monchi
Marcao llegaba al Sevilla FC con la díficil papeleta de suplir a Diego Carlos. Se fue también Koundé y el brasileño se lesionó. No ha podido debutar todavía y la defensa de Lopetegui hace aguas. El futuro a corto plazo no es muy halagüeño y Monchi ya busca posibles soluciones.
Una situación similar a la que está sucediendo con Tanguy Nianzou, por quien pagaron al Bayern de Munich 16 millones de euros en los últimos días de mercado. Todo para mostrar un rendimiento muy pobre en los primeros partidos de liga, siendo superados por canteranos como Salas o Carmona. Es por eso que se busca nuevo central.
El Sevilla FC necesita espabilar
Actualmente, con el mercado de traspasos cerrado, el Sevilla FC solo tiene dos opciones factibles para reforzar el eje de la zaga. Estas opciones son el belga Denayer y el francés Zagadou, quienes se encuentran sin equipos tras finalizar sus contratos con el Olympique de Lyon y Borussia Dortmund, respectivamente.
Los dos jugadores están en el radar del Sevilla FC, pero por el momento no hay nada entre las dos partes. De hecho, salvo sorpresa, ninguno de ellos llegará al Sánchez-Pizjuán, pues el club hispalense prefiere realizar una inversión económica en un futbolista que garantice un buen rendimiento desde el primer momento.
Marcao obliga al Sevilla FC a buscar soluciones
Sabedores de que Marcao podría tener un año complicado con las lesiones, el club hispalense se habría fijado un nuevo objetivo para el mercado de verano. Se trata de un jugador que ya ha sido tanteado por Monchi en anteriores ocasiones. No obstante, siempre se ha topado con una respuesta negativa de su equipo, el CA Osasuna.
Ese jugador no es otro que David García, quien incluso llegó a sonar para equipos como el Atlético de Madrid. En invierno su salida del conjunto de Pamplona será prácticamente imposible. Pero el Sevilla FC, que ha cerrado un mercado de traspasos con beneficios de 60 millones de euros, podría optar por pagar su cláusula de rescisión. Una cláusula que actualmente es de 20 millones de euros.
