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Monchi señalado culpable en la bancarrota del Sevilla FC

El Sevilla FC, un club que fue ejemplo de gestión, ha entrado en una grave crisis financiera tras años de malas decisiones

El Sevilla FC, durante muchos años considerado un modelo de gestión exitosa en España, está atravesando una de las peores crisis financieras de su historia. La reciente solicitud de dos créditos ha generado alarma, y José María del Nido Benavente, expresidente del club, ha sido contundente al criticar a la directiva actual. A pesar de los recientes títulos europeos conseguidos, el club parece estar al borde de la quiebra. Del Nido Benavente insiste en que la entidad ha estado en caída libre durante los últimos años, y ha solicitado una Junta Extraordinaria de Accionistas para abordar esta crisis.

La situación del Sevilla se ha agravado especialmente desde la pandemia, cuando las finanzas de muchos clubes, incluido el Sevilla, se vieron gravemente afectadas. Aunque la consecución de la Europa League en esos meses ofreció un respiro temporal, no fue suficiente para revertir el deterioro económico. La pérdida de jugadores clave, junto con una gestión financiera deficiente, ha empujado al club hacia una situación límite que ahora enfrenta una creciente presión tanto en lo deportivo como en lo institucional.

Los aficionados empezaron a criticar los fichajes, y la calidad del equipo en el campo comenzó a caer drásticamente.

La salida de Monchi y el declive deportivo del Sevilla agravaron la crisis

La figura de Monchi fue clave para el éxito deportivo y financiero del Sevilla, pero su salida en 2023 marcó el inicio de un declive en ambos frentes. Bajo su dirección, el club logró fichajes estratégicos que generaron grandes ingresos a través de la venta de jugadores, permitiendo mantener un alto nivel competitivo. Sin embargo, la pandemia y la falta de nuevos talentos tras su partida debilitó esta fórmula de éxito.

Víctor Orta fue designado como el nuevo director deportivo, pero heredó una situación complicada. La falta de recursos financieros limitó su capacidad para reforzar la plantilla, que además ya mostraba signos de envejecimiento. Las ventas de jugadores importantes, como Koundé y Diego Carlos, no fueron suficientes para aliviar la situación financiera, y el club tuvo que recurrir a fichar jugadores descartados de otros equipos. El equipo apenas pudo evitar el descenso, y la afición sigue descontenta por el bajo nivel de competitividad.

La lucha por el poder en el Sevilla agrava la crisis interna

A la crisis financiera y deportiva del Sevilla se le suma una guerra interna por el control del club. José María del Nido Benavente ha intentado recuperar la presidencia, mientras que la actual directiva, liderada por José Castro y su hijo Del Nido Carrasco, lucha por mantener su posición. Esta lucha interna ha generado inestabilidad dentro de la institución, afectando tanto la toma de decisiones como la capacidad de respuesta ante los problemas financieros. Aunque Del Nido Benavente ha sido muy crítico, la directiva actual ha intentado buscar soluciones, pero con poco éxito hasta ahora.

El futuro del Sevilla es incierto. A pesar de que lograron evitar el descenso la temporada pasada, la falta de recursos y la creciente tensión dentro del club no auguran un camino fácil. El equipo tendrá que enfrentar decisiones cruciales en los próximos meses si quiere recuperar la estabilidad financiera y deportiva que una vez lo caracterizó.

Peque Sevilla