Ya se tiene una buena idea de lo que puede pasar a futuro con una de las posiciones más delicadas en el equipo
Jules Koundé está más en duda que siempre en el Sevilla FC por razones apenas lógicas, muchos equipos siguiéndole la pista y un Sevilla necesitado de concretar una venta de gran tamaño para poder subsistir. Es por eso que Monchi, su director deportivo ha decidido apoyarse en la tecnología para pasar de largo el tema.
A través del Big Data ha podido filtrar tres alternativas de fichajes en el escenario mundial que le permiten tener un poco de margen de acá a que se presente el momento. De esos tres jugadores hay excelentes sensaciones, y más que eso existe el margen positivo teniendo en cuenta sus edades y valores.
Para el Sevilla es importante ubicar cuanto antes el remplazo de Koundé si no quieren perder fuerza en el entorno mundial
Un jugador como éste no es sencillo de remplazar y por tanto las opciones están siendo muy marcadas por diversos factores. Uno de ellos la economía, y es que no deja de ser cuestionable el hecho que el club busca hacer la menor inversión posible para generar dividendos.
Y ahora el Big data ha soltado tres resultados que ya analizan. El primero de ellos es William Saliba que juega en el Olympique de Marsella, un jugador de 20 años que tiene cualidades muy definidas. Sabe salir jugando de atrás, entiende los distintos funcionamientos por la diversidad de dibujos y controla bien el área. Su valor es el gran problema, ya que está cedido por el Arsenal.
Los otros dos nombres aunque en menor escala tienen lo que se pide
Siguiendo el listado se ubica Benoït Badiashile, otro valor de tan solo 20 años que milita en el AS Mónaco. A diferencia del anterior su precio es más contenido, pero en características no hay muchas diferencias. Tiene una cualidad y es salir jugando de atrás, encontrando mucho jugador por su enorme visual del campo.
Y por último han identificado a Alexander Djiku, quizás el más veterano de todos, 27 años, pero con un sentido de pertenencia excepcional. Juega en el Strasbourg y aunque puede cumplir de entrada, tiene el problema de la proyección. En el verano se toman decisiones pero tal parece de acá saldrá el nombre del elegido.