Un golpe a dos bandas favorecería al cuadro andaluz que busca talento y eficacia en el frente de ataque
Si hay algo que se le pueda reprochar en este instante al Atlético de Madrid es la falta de oportunidades que le dieron a Moussa Dembélé. El ex delantero de Olympique de Lyon ha estado inmerso en diferentes opiniones, como por ejemplo la que dice que su nivel no es el mismo, y que cuando se le ha dado la oportunidad no ha respondido. Todo muy en favor del Sevilla ya que el Arsenal sería el mayor candidato a quedárselo y eso llevaría a la liberación de Lacazette.
Como bien se sabe los andaluces andan buscando un jugador para esa zona, ante las amenazas de fuga que poseen con De Jong y En-Nesyri. Las dos referencias del ataque están abonadas por ese hecho y han llegado a mencionar que estarían apelando por una incidencia que busca claridad en la vía. Lacazette tiene experiencia, y los goles que se buscan ahora mismo.
La realidad del fichaje de Lacazette asume un manto de autoridad de parte del Sevilla sobre el resto de opciones en el mercado
Monchi parece no tener piedad, está listo para asumir sus retos y para dotar de calidad a su entrenador. En Lacazette ha identificado fuerza, explosión, capacidad para sostener y mucho gol. Todos argumentos válidos para Lopetegui que lo único que ha pedido ha sido pulir nominalmente la idea de juego que tan buenos resultados les ha dado a lo largo del tiempo que lleva al frente.
Están esperando qué vana decidir en el tema Dembélé, pues como se ha propagado es un tema que va muy adelantado. De hecho, el Atlético ya ha dicho que no va a ejercer el pago de la opción, y llevaría todo a otros terrenos. El jugador se debe presentar en Francia, y una vez allí empieza el proceso regular. Esta vez por valores más contenidos debido a su bajón futbolístico.
El buen cartel de Dembélé le permite al Sevilla sumar sin pagos a un crack
Fue Lacazette no solo importante en las divisiones menores en su país, sino que con la camiseta mayor ha dado grandes gestas. En Arsenal ha pasado por varios puntos de referencia, pero siempre con el gol bajo sus botas. Eso le permite seguir vigente, y ahora mucho más ya que su contrato expira y no hay necesidad de asumir pagos innecesarios.
Al igual que sucede con Moussa Dembélé, un jugador que ha pasado de 42 millones de euros a solo 30. Los londinenses ya tiene fijo cuál va a ser su fuerza a ejecutar, y lo mejor de todo es que se han dedicado a peinar el mercado en busca de ello. No hay más material para revisar, es todo potestad de autoridad de los jefes que necesitan empezar a maniobrar con ello.