Todo se define en donde se suele hacer para estos casos, en el área financiera
Una de las grandes materias a tratar tanto en el Real Betis Balompié como en el Sevilla FC tiene que ver con el manto de las contrataciones para la siguiente temporada. Ambas secretarías técnicas tienen funciones delimitadas en lo que será la construcción de sus plantillas, aunque deban mirar demasiado en el mercado internacional debido a las altas demandas en la interna que viven ahora mismo.
En ese punto, un jugador perteneciente al AS Roma italiano ha llamado su atención, llegando a jugar con la expectativa y el morbo, el quién y de qué modo podrá llevarse el gato al agua es la pregunta del momento. Se trata de Cengiz Ünder, un extremo turco de tan solo 22 años que ha pasado la campaña actual entre las dudas de su continuidad y evolución o su partida.
Monchi lo tiene atado, sabe de sus condiciones y ha tratado antes su aspecto legal
En el cuadro italiano, este talentoso extremo o medio de armado, ha rendido a dos tintas. Una primera etapa muy buena, con titularidades, y revulsivos importantes, y una segunda sin trascendencia y pasado al ostracismo. Ahora mismo ve claras sus opciones de salida, y empuja porque sea LaLiga el siguiente destino que le acoja.
Y si existe alguien que le conozca a la perfección ese es Monchi. El director deportivo del Sevilla FC fue el gestor de su fichaje al cuadro romano. Cuando cumplía dicha función en Italia fue el que presionó para su compra, en aquella época por valor de 14,25 millones de euros, proveniente del club Istanbul Basaksehir de su país.
A Ünder lo único que le pone el freno de emergencia es la alta exigencia romana
Pese a que no viene contando mucho para el cuerpo técnico, y además, a estar un par de escalones abajo en las consideraciones, en la cúpula directiva del cuadro de la capital del vecino país, siguen considerando al turco como una de sus joyas. Por tal motivo exigen un pago de 35 millones de euros, que tanto para el Sevilla como para el Betis es un completo desafío si quiera llegar a considerarlo.
Ninguno está por la vía de acometer semejante movimiento, en tiempos de crísis y con tantas opciones a la baja. Si se estiman suficiente rebajar los pagos a 20, los residentes del Sánchez Pizjuán podrían tomarlo, mientras que los del Benito Villamarín, albergarían otra acción poniendo jugadores suyos en parte de pago. Todavía es un tema endeble, que no ha llegado a oficializarse y que ese encuentra en procesos de estudio. Eso sí, no le puede quitar el ojo de encima. Atentos.