Lo que parecía un acierto ha acabado en error lo que incita a los jefes del club a ir de nuevo por el jugador formado en el Athletic
Siguen apareciendo algunos huecos en la idea de la Real Zaragoza de acuerdo a lo último que se ha visto, sobre todo cuando se analizan casos puntuales que como el de Larrazabal tanto resaltan. El canterano del Athletic Club llegó a la entidad blanquilla, en donde la obligación, las urgencias y la presión de la gente le han impedido triunfar.
Motivo de sobra para que los encargados del club determinaran su salida, una salida que hoy les cuesta más de una recriminación. Así lo ha demostrado el presente, que como se puede argumentar es muy positivo en el recién ascendido Amorebieta. Un club que le ha dado el respaldo de jugar muchos minutos, y la confianza basada en creer en sus capacidades.
Situación densa y controvertida han acabado sepultando a Larrazabal en su estadía dentro de la Real Zaragoza
JIM le dio oportunidades pero la respuesta fue nula. Quizás ese rótulo de sumarse a un equipo tan comprometido le acabó afectando, y el resultado se ha visto. Técnicamente tiene mucho margen de mejora, pero es cierto que apenas está despuntando. La sorpresa se la han llevado a partir de los minutos jugados este curso.
Para el club recién llegado a la categoría de plata es indispensable, y hasta se ha reportado con un gol, que aunque no sirvió para sumar de a tres, ha servido para llenarlo de confianza. Larrazabal es un jugador lleno de ilusión y así lo destacan los medios. El comienzo de temporada donde tuvo minutos pudo ser ese click, que ahora les va a costar poderlo incorporar.
Con muchas grietas en esa zona, el objetivo es una recaptura a favor económicamente
Si bien tuvieron todo el argumento del caso para verlo triunfar, se han quedado en nada y eso es lo que les condena. Tomarlo hoy en el mercado de invierno les va a costar, aunque tienen la gran favorabilidad de tener potestad sobre las decisiones futuras del jugador por la vía legal. Eso sí, cortar una cesión es un proceso engorroso, y que emite ciertas problemáticas.
Aunque a día de hoy no quedan dudas y todo señala que ese es el paso a concretar. Larrazabal está condenado a tener que responder en La Romareda, esta vez con otra óptica, con un equipo mejor situado en la tabla general y con un grupo que está pensando en meterse de lleno al menos a la ronda eliminatoria en busca del ascenso.