Juan Cruz en el radar del Real Zaragoza: el director deportivo busca lateral izquierdo, pivote defensivo y atacante
Juan Carlos Cordero, director deportivo del Real Zaragoza, ha puesto en marcha su maquinaria para reforzar el equipo en el mercado de enero: Juan Cruz es la clave. Con tres objetivos claros en su radar: un lateral izquierdo, un pivote defensivo y un atacante, Cordero busca solventar las necesidades del equipo tras la reciente eliminación en la Copa del Rey.
La baja de Carlos Nieto y los problemas de Quentin Lecoeuche han hecho que la búsqueda de un lateral izquierdo se convierta en una misión urgente. Cordero, conocido por su habilidad para identificar y atraer talento, ya tiene en su lista a varios jugadores de Primera y Segunda División. Entre ellos, figuran Ibrahima Kebe del Girona, Omenuke Mfulú de Las Palmas y Mickael Malsa del Valladolid.
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La estrategia y visión de Cordero siempre han estado centradas en encontrar jugadores que aporten un equilibrio entre energía, capacidad física y solidez defensiva. Recordemos sus anteriores proyectos en Tenerife y Cádiz, donde pivotes como Jurado y Doucouré destacaron por su consistencia y aportación táctica.
En cuanto al lateral izquierdo, Cordero parece inclinarse más por opciones internacionales, dada la escasez de jugadores disponibles en el mercado nacional. Esta búsqueda es un reflejo de su enfoque meticuloso y adaptativo, buscando siempre lo mejor para el equipo en cada situación específica.
El Real Zaragoza ya trabaja en el mercado de enero con tres prioridades en la carpeta de fichajes de Juan Carlos Cordero
El Zaragoza no se limita solo a buscar refuerzos en la defensa y el centro del campo. La ofensiva también es un área de interés, especialmente dado el estado de la lesión de Iván Azón. Cordero había mostrado interés en la cesión de Juan Cruz, un jugador versátil capaz de jugar tanto en la banda izquierda como en la derecha.
Las decisiones de Cordero reflejan una profunda comprensión del juego y una capacidad para adaptarse a las circunstancias cambiantes. Su enfoque no es solo reaccionar a las necesidades actuales del equipo, sino también anticiparse a los desafíos futuros, asegurando que el Real Zaragoza esté siempre un paso adelante.
