La lesión de Keidi Bare impulsa al club a reforzar la posición de mediocampo
El Real Zaragoza ya tiene claro su objetivo principal para el mercado de invierno: fichar un mediocentro físico y de envergadura. La necesidad de reforzar esta posición se ha hecho evidente tras la lesión de Keidi Bare, que dejó al equipo con un déficit en el centro del campo, un área clave para la estrategia del técnico Víctor Fernández. Durante el mercado de verano, el club intentó sin éxito incorporar un jugador con este perfil, y la situación actual ha llevado a la directiva a buscar alternativas para enero.
Cordero, director deportivo del Zaragoza, intentó encontrar opciones en el mercado de jugadores sin contrato, pero ninguna de las opciones convenció al club. El deseado durante el verano era Chrisantus Uche, un joven mediocentro que finalmente acabó en el Getafe y que ahora es una pieza clave en el equipo de Bordalás.
La búsqueda de un mediocentro y otras necesidades del equipo
La ausencia de un mediocentro con las características físicas necesarias ha sido un problema que Víctor Fernández ha destacado en varias ocasiones. El Zaragoza también ha considerado otros nombres, como Roque Mesa, pero el jugador canario no encaja en el perfil que busca el equipo debido a su edad y falta de ritmo competitivo. Además de este mediocentro, Víctor también ha señalado la necesidad de incorporar un extremo derecho puro y un central, aunque el mediocentro sigue siendo la prioridad.
Durante los últimos partidos, el técnico ha tenido que buscar soluciones temporales. Toni Moya cubrió bien la baja de Bare en Burgos, pero su salida del campo por acumulación de tarjetas dejó al equipo vulnerable en el centro del campo. Aunque Víctor adelantó a Vital para equilibrar el juego, el Zaragoza acabó perdiendo el partido debido a una desatención defensiva en el último minuto. Este tipo de situaciones refuerza la urgencia de contar con un mediocentro físico que permita enfrentar mejor los rigores de la competición.
El reto del extremo derecho y la llegada de un central
Además del mediocentro, la falta de un extremo derecho puro es otra de las preocupaciones del equipo. Actualmente, no hay ningún jugador en la plantilla que cumpla con el perfil ideal para esa posición, uno que tenga desborde, capacidad para el uno contra uno y que sea capaz de centrar desde la línea de fondo. Aunque Adu Ares ha sido señalado como una posible solución, el jugador vasco ha dejado claro que prefiere jugar en la izquierda, donde Liso se ha consolidado como uno de los mejores de la categoría.
Víctor ha probado varias alternativas, incluyendo a Bermejo, Pau Sans y Luna, pero ninguno ha logrado asentarse en esa posición. La esperanza está puesta en la recuperación de Aketxe, quien podría ser la solución a este problema una vez vuelva de su lesión. Sin embargo, la prioridad sigue siendo el mediocentro, seguido por un extremo, y la incorporación de un central, aunque importante, queda en un segundo plano.