La actividad no para en el club de Pucela que se anticipa a los movimientos del mercado en busca de clarificar la idea de Pacheta que hasta acá ha dado resultado
Real Valladolid estuvo demasiado cerca de cerrar dos fichajes en el mercado de fichajes de invierno, con los cuáles buscaba dar el paso al frente en la certificación de su ascenso. Metido en la pelea, segundo en la tabla y a un punto del líder, la SD Eibar, la expectativa no para de crecer en la medida que el trabajo rueda.
Por eso, parte de su zona directiva ha establecido que la mejor medida es buscar en el mercado alternativas muy fiables. Estos nombres son: Jon Guridi y Fran Mérida. Ambos jugadores han admitido que les seduce la posibilidad, y más al tratarse de una representación de Ronaldo.
Los primeros pasos para certificar estos fichajes ya está dado, ahora solo resta que el Valladolid certifique su ascenso
Cuando se habla de este par de jugadores, se tiene que hablar directamente de opciones. Y es que ya estuvieron en la baraja de alternativas y no fue suficiente. Ambos han decidido acabar la temporada en sus clubes de origen y establecer un vínculo mucho más estable desde lo legal y deportivo a partir del siguiente curso.
En el caso de Guridi por orden estricta de Imanol Alguacil, mientras que por el lado de Mérida, fue un tema mucho más ligado a las exigencias económicas que limitaban un poco el presupuesto pucelano ante la gran complejidad que ponía poder salir de ciertas figuras.
Pacheta está forjando un equipo altamente competitivo
Tardaron unas cuantas jornadas para establecerse al ritmo de la categoría, peor una vez arrancaron no hubo poder humano que les detuviera. Pues bien, tal ha sido el nivel de agrado de la directiva que ya valora la posibilidad de incluir ciertas adiciones y mejorar progresivamente el compuesto.
Con Guridi y Mérida ganan peso en la zona media, integrando aspectos más allá de la dinámica como la inteligencia posicional y sus llegadas a zonas de peligro con autoridad. Además hay que decir que en cierta medida es importante establecer políticas a largo plazo, y evitar ese manoseo de plantillas que acaba dando tan malos resultados.